Rudy Gobert gana su tercer premio al Jugador Defensivo del Año

Ben Simmons fue segundo y Draymond Green, tercero, fue el estadounidense en un puesto más alto

Los Utah Jazz, liderados por Gobert y Mitchell, han sido el mejor equipo de la temporada regular

Gobert, antes de un partido con los Utah Jazz.

Gobert, antes de un partido con los Utah Jazz / AFP

EFE / Houston

El baloncesto europeo volvió a ser el gran protagonista en la entrega de premios a los mejores profesionales durante la temporada regular de la NBA 2020-21 después de que este miércoles fuera elegido ganador del Jugador Defensivo del Año el pívot francés Rudy Gobert, de los Utah Jazz. El premio fue el tercero que consigue desde que llegó a la NBA y se da un día después de que otro pívot europeo, el serbio Nikola Jokic, de los Denver Nuggets, recibiera el galardón del Jugador Más Valioso (MVP).

Gobert, de 28 años, se convierte en el cuarto jugador que durante su carrera recibe el premio al menos tres veces, y se une así a Dikembe Mutombo, Ben Wallace y Dwight Howard, que son los únicos jugadores que lo han ganado al menos tres veces. Mutombo y Wallace lo ganaron cuatro veces cada uno, y Howard lo ganó tres. "Es increíble", dijo Gobert en relación a haber ganado el premio en tres ocasiones. "Cuando empecé a jugar al baloncesto de niño, si alguien me hubiera dicho que iba a ser el jugador defensivo del año, nunca les habría creído, y mucho menos tres veces".

Gobert también dijo sentirse agradecido de haber llegado tan lejos en un deporte que, además, le apasiona. El pívot francés acabó la temporada regular con promedios de dobles-dobles al tener 14,3 puntos; 13,5 rebotes y 2,7 tapones (mejor marca como profesional).

Utah comenzó su ascenso para ser uno de los equipos de élite de la Conferencia Oeste hace varios años gracias a un equipo lleno de jugadores defensivos que conectaban muy bien con el enorme conjunto de habilidades especiales de Gobert, que también tiene en su haber el ser el primer jugador de la NBA que dio positivo en covid-19. Esto hizo que comenzasen a suspender en cadena todas las competiciones deportivas en Estados Unidos.

Con otros jugadores dentro del equipo que anotan mejor, los Jazz han confiado más en Gobert a la hora de mantener la defensa del equipo en un nivel muy alto, aunque su capacidad encestadora es también buena desde cualquier posición. La fórmula acabó teniendo éxito al concluir la temporada regular como el cuarto mejor ataque y la tercera mejor defensa de la liga, para, en la combinación global, ser el mejor equipo de la NBA. Los Jazz acabaron con 9 puntos por cada 100 posesiones por casi tres tantos sobre sus competidores más cercanos Los Angeles Clippers (6,1), a los que se están enfrentando en la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Oeste con ventaja de 1-0 para el equipo de Utah.

Gobert acabó con 84 votos para el primer lugar y 464 puntos, seguido de lejos por el base australiano Ben Simmons (Philadelphia 76ers), que logró 287 puntos y fue segundo, mientras que el ala-pívot Draymond Green (Golden State Warriors) acabó tercero tras recibir 76 puntos, aunque no tuvo ningún voto para el primer lugar. Si recibió uno para el primer lugar el pívot Bam Adebayo (Miami Heat), que acabó cuarto con 31 puntos, pero se convirtió en la gran decepción individual de la temporada regular, dado que se esperaba que al final tuviese mejor rendimiento individual y de equipo.

Simmons, uno de los defensores más versátiles de la liga gracias a su altura y sus impresionantes dotes atléticas, ayudó a encabezar la segunda mejor defensa de la liga, lo que, a su vez, ayudó a Philadelphia a reclamar el primer lugar en los playoffs de la Conferencia Este. Green, por otro lado, demostró que todavía es más que capaz de tener un impacto significativo en la defensa después de llevar a los Warriors a la quinta mejor calificación defensiva de la NBA durante la temporada regular.

La NBA ya anunció los premios de Sexto Jugador, que ganó el compañero de Gobert, el base Jordan Clarkson; el del Jugador de Mayor Progreso, que recibió el ala-pívot Julius Randle (New York Knicks); el del Entrenador del Año, que se quedó también en Nueva York con los Knicks al recibirlo Tom Thibodeau, y el del MVP para Jokic. Aún queda por repartir el premio individual del Novato del Año y los de los Equipos All-Novatos, All-Defensivos y All-NBA.