Ona Carbonell vuelve a brillar en la piscina

Ha vuelto al equipo nacional en los europeos de Budapest tras su año sabático para ser madre

“Estoy muy feliz, muy agradecida a Mayu y a mis compañeras porque me han ayudado mucho", explicó tras el bronce

Ona Carbonell realizando la rutina en Budapest

Ona Carbonell realizando la rutina en Budapest / EFE

Cristina Moreno

Ser madre y deportista de élite es un binomio difícil de combinar, aunque no imposible. Ona Carbonell es la muestra de ello. La medallista olímpica tomó hace tiempo la decisión de aparcar su brillante carrera en la piscina para perseguir otro objetivo importante en su vida, el de tener un hijo. Una decisión que la ha mantenido fuera de la competición durante un tiempo, pero que no ha mermado su capacidad baja el agua.

La nadadora barcelonesa se marcó como punto para su vuelta el Preolímpico -pospuesto por la FINA para este mes de junio-, pero la pandemia ha trastocado un poco esos planes y la esperada vuelta ha tenido lugar en el Europeo de Budapest que se está celebrando estos días.

Y el regreso no podría haber ido mejor, con un bronce en la final de la rutina técnica por equipos, la decimotercera medalla en unos campeonatos europeos para una de las deportistas españolas más laureadas de la historia.

complicada Conciliación

La cita, suponía su vuelta a la competición con el equipo nacional casi dos años después, con el que no competía desde los Campeonatos del Mundo de 2019. “Estoy muy feliz, muy agradecida a Mayu (seleccionadora nacional) y a mis compañeras porque me han ayudado mucho en este camino que no ha sido fácil”, explicaba Carbonell tras conseguir la medalla.

La nadadora se ha visto obligada a cambiar sus rutinas habituales con la maternidad, variando sus sesiones de entrenamiento para poder dar el pecho a su hijo Kai y armando un auténtico rompecabezas para combinar sus dos vidas.

“La conciliación familiar para las mujeres deportistas no existe”, reconocía en una entrevista hace unos meses, aunque está claro que ha sabido cómo hacerlo funcionar y volver en plena forma.

Superada la primera gran prueba de fuego de una temporada que apunta a ser ajetreada, el objetivo de Ona es claro: “Quiero ir a mis terceros Juegos por lo que significa después de ser madre”.