Ona Carbonell, con más motivación después de participar en Masterchef

Ona Carbonell llega al final de un año diferente para ella, donde ha desconectado un poco de la natación artística para vivir nuevas experiencias, como concursar y ganar el concurso Masterchef Celebrity. Eso sí, campeona lo ha seguido siendo aunque sea en los fogones. 

Pero sus objetivos de cara al 2019 son claros, ha conectado de nuevo el chip del agua y ya tiene nuevos retos para el año que está a punto de empezar. El primero será ganar alguna medalla en solo, dúo y equipo en el Mundial de Corea para incrementar las 20 preseas mundialistas que cuelgan en su palmarés.

Pero antes de iniciar un intenso año de nuevo con muchas horas de entrenamientos,  Ona quiso desear felices fiestas a todos sus seguidores y lo hizo desde el Aquarium de Barcelona en el tradicional acto que cada año organiza esta instalación donde un deportista se baña entre tiburones y elige una ONG a quien hacer entrega de los 5.000 euros que dona el Centro Marino por Navidad. Carbonell decidió que la organización que se beneficie de esta aportación económica sea la ONG Oxfam Intermón.

Y no ha sido elegida al azar, sino que estamos hablando de una organización experta en facilitar el acceso al agua potable en situaciones de emergencia y que destinará los 5.000 euros a su campaña #UnGranrepte que desea conseguir que 62.000 niños y niñas en situación de emergencia tengan agua limpia para lavarse las manos y así evitar el contagio de enfermedades mortales.

La nadadora aceptó el reto de sumergirse en el oceanario cuyas dimensiones y capacidad lo hacen único en Europa y nadó entre tiburones y 80 especies marinas y aprovechó para desplegar una pancarta con los mejores deseos para estas fiestas y el mensaje: ‘Cuidar el agua es preservar la vida’.

Tras zambullirse en un medio en el que se siente sumamente cómoda, Carbonell  aseguró que haber desconectado un poco de la piscina este año y su particiación en el programa Masterchef le han dado motivación: “Cuando rodaba el programa le decía a ‘Mayu’ (Mayuko Fujiki ) que estaba segura de que todo esto me ayudaría. Estar fuera de mi zona de confort me ayuda a crecer, y efectivamente ahora mi entrenadora me dice que me ve mentalmente más fuerte, más motivada”.

La subcampeona olímpica insistió en que “después de 15 años haciendo la misma rutina cada día, de repente salir de ella y conocer otros mundos me ha dado serenidad, tranquilidad y a la vez motivación. Me quedan dos años muy bonitos de mi vida, los quiero disfrutar y quiero darlo todo”, dijo tras nadar entre tiburones.

Ona desveló que en las Series Mundiales empezarán a enseñar las nuevas rutinas para ver el ‘feed-back’ de los jueces y el público y será entonces “cuando se verán los nuevos bañadores” que ella misma está diseñando.

Según Carbonell, “la selección española de sincronizada está en un buen momento” y animó a todos os aficionados a no pensar solo en Tokio 2020 sino ir un poco más allá y hacerlo también en París 2024.

Primero, a esperar el Mundial 2019.