RECONCILIACIÓN DIPLOMÁTICA

La paz con Marruecos da los primeros frutos: más trabajo conjunto contra la inmigración

Se recuperan y potencian las patrullas conjuntas y se acuerda dar más agilidad a las devoluciones | Rabat pide a cambio más recursos de la UE para su labor de control de los flujos migratorios

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el rey Mohamed VI, en su reunión en Rabat.

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el rey Mohamed VI, en su reunión en Rabat.

Marisol Hernández

Ajena al enorme ruido de la política española, con los escándalos sucesivos del espionaje a los independentistas y al presidente del Gobierno, 

Pedro Sánchez

, y la ministra de Defensa, 

Margarita Robles

, la paz diplomática entre España y

Marruecos

 se abre camino y comienza a dar sus primeros frutos. Incluso con el estrés que ha supuesto el señalamiento a Rabat como posible autor de la intrusión en el teléfono de Sánchez y del robo de datos, con el 

'software' Pegasus

.

Los dos países han optado por taparse los oídos y, mientras siguen negociando la reapertura de fronteras en Ceuta y Melilla, han cumplido con uno de los puntos incluidos en el comunicado conjunto que selló el final de la larga crisis entre Madrid y Rabat: la reunión del grupo permanente hispano-marroquí para 

relanzar y reforzar la cooperación en materia de migraciones

. Uno de los asuntos que más interesa al Gobierno español. De hecho, la dependencia que España tiene de Marruecos en el control del flujo migratorio, el narcotráfico o el yihadismo son la explicación al apoyo que el Ejecutivo ha dado a su plan autonomista para el

Sáhara Occidental

.

Una delegación española, presidida por el secretario de Estado de Migraciones, Jesús Javier Perea, junto al secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, y la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Ángeles Moreno, se reunió este viernes en Rabat con el director de las Migraciones y de la Vigilancia de Fronteras de Marruecos, Khalid Zarouali, y otros representantes de su Gobierno.

Se estrecha la colaboración

En ese encuentro, entre otros temas, se acordó fortalecer los mecanismos de coordinación e intercambio de información, con nuevos métodos de trabajo en los Centros de Cooperación Policial y de oficiales de enlace y la decisión de potenciar las patrullas conjuntas, con agentes de la Guardia Civil y de la Gendarmería Real, que están suspendidas desde el comienzo de la pandemia. El objetivo es retomarlas a partir del mes de julio. Como sucede con el cierre de las fronteras, ésta es otra de las cuestiones que Marruecos mantenía varado para presionar a España y que cediera en el giro sobre el Sáhara.

Pero, ahora, en esta nueva etapa de relaciones bilaterales, no solo se recuperan estas patrullas mixtas para vigilar la inmigración, sino que el compromiso es ampliar su estructura y las zonas de despliegue para adaptarse a los nuevos puntos de partida de la inmigración irregular en las rutas hacia España, el Atlántico y el Mediterráneo occidental.

Las devoluciones

El propósito es extender estos intercambio a otras ciudades y que la convivencia de ambos cuerpos de seguridad sea de entre 7 y 10 días. Todos estos pormenores se abordarán en una nueva reunión en España a finales de mayo, entre miembros de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de Policía Nacional con agentes de inmigración y fronteras marroquíes para continuar mejorando los operativos de lucha contra las redes de inmigración irregular, según explican fuentes de la delegación española.

En la cita se trató también la necesidad de que funcionen las operaciones de retorno de inmigrantes ilegales "como elemento desincentivador de las salidas hacia las Islas Canarias" y de lucha contra el desmantelamiento de las redes de tráfico de seres humanos. Es sobre todo una reclamación española. Marruecos acepta más o menos devoluciones, en función de la temperatura de su relación con España. Los dos países han acordado ahora dar respuestas "ágiles y flexibles" y poner el foco en la repatriación de menores, que Rabat sólo acepta "debidamente identificados".

Como contrapartida a su colaboración, Marruecos pide más dinero del nuevo Marco Financiero Plurianual de la Unión Europea y España se ha comprometido a defenderlo en Bruselas porque reconoce "el gran esfuerzo realizado por las autoridades marroquíes en la lucha contra la inmigración ilegal".

Si la cooperación y la comunicación sigue por estos derroteros, antes de que acabe el año debe celebrarse una Reunión de Alto Nivel (RAN) entre los dos gobiernos. Tras un desencuentro tan profundo y con la cesión española que ha significado el aval a la propuesta marroquí sobre el Sáhara, sólo la confirmación de que los servicios secretos de Mohamed VI espiaron a Sánchez, podrían acabar con esta luna de miel. Pero esto parece muy improbable. Aunque el teléfono del presidente del Gobierno se intervino en momento más duro de la crisis con Rabat, este tipo de ataques normalmente no se pueden atribuir.