Lesmes advierte que dimitirá si los políticos no pactan ante el "estropicio" sin precedentes de la Justicia

El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, 

Carlos Lesmes, ha perdido la paciencia. Durante su discurso con motivo de la apertura del año judicial, y en presencia del rey Felipe VI, ha subido el tono para denunciar que "la justicia está siendo sometida a unas tensiones que pueden abocarla a la inoperancia" por el bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)

, por lo que

exige al PSOE y al PP que se "reúnan con urgencia

para poner solución definitiva a una situación que califica de "insostenible".

"Un año más", según ha enfatizado nada más tomar la palabra, "el escenario político está debilitando y erosionando las principales instituciones de la justicia española", para añadir que se refiere tanto al órgano de gobierno de los jueces como al Tribunal Supremo."

"De no ser atendido este llamamiento que hoy hago, será preciso reflexionar sobre la adopción de otro tipo de decisiones que ni queremos ni nos gustan", ha llegado a manifestar, sin aclarar si estas palabras adelantan una eventual renuncia al cargo. "Hoy la confianza ha desaparecido", ha manifestado.

Se trata de la cuarta ocasión en la que Lesmes lee su discurso en este acto formal -el de mayor importancia institucional que celebra el Poder Judicial- representando a un órgano de gobierno de los jueces caducado ante la incapacidad del PSOE y el PP de pactar su renovación. Se acumulan más de 1.300 días desde que en diciembre de 2018 concluyeron los mandatos de sus veinte vocales, que consideran esta situación de insostenible.

El llamamiento al pacto lo ha dirigido directamente "al presidente del Gobierno de España y al jefe de la oposición", esto es, a 

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo como "máximos responsables de los partidos políticos con mayor representación parlamentaria, de manera que el CGPJ sea renovado en las próximas semanas o, de no serlo, sea restituido en la plenitud de sus competencias, "otorgando a esta petición la relevancia constitucional y democrática que realmente tiene y dejando de lado todo interés de partido". También hace Lesmes una llamada de atención a la sociedad, que a su juicio parece "aletargada ante el deterioro" del Estado Derecho.

Reformas que causan "estropicio"

Sobre las últimas reformas legales que han afectado al Consejo, al prohibir los nombramientos en la cúpula judicial -con excepción de los magistrados del

Tribunal Constitucional (TC)

- ha dicho que "el estropicio es tan grande que no se había producido una situación semejante en la historia de nuestra democracia". Los efectos negativos son especialmente graves en el Supremo, aunque "se van extendiendo poco a poco a toda la la organización judicial".

Se refiere al a reforma de marzo de 2021, cuyos efectos ha calificado de "devastadores". El Tribunal Supremo tiene 14 vacantes sin cubrir y en los próximos meses serán 20, según ha advertido, lo que representa una cuarta parte de sus efectivos. Además, de las 116 presidencias de tribunales existentes en nuestro país, 49 de ellas no están desempeñadas por un titular y el próximo 21 de diciembre la Sala de Justicia del Tribunal Militar Central dejará de actuar por falta de reposición de todos sus miembros, procedentes del cuerpo jurídico militar.

Así, ha afeado que el Gobierno eludiera oír al CGPJ cuando realizó esta reforma y que tampoco se recabara su opinión para el nuevo cambio en la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) que apodera de nuevo al Consejo para hacer nombramientos, pero sólo de los dos magistrados del Tribunal Constitucional (TC) que le corresponde por cuota, "ignorando deliberadamente la penosa situación" del Supremo. Ha añadido que si bien el TC es un "órgano nuclear de nuestro sistema político-constitucional", también el alto tribunal que él preside es esencial, pues "encarna el principio de juridicidad del Estado" y se ha erigido a lo largo de sus más de doscientos años de historia en un "mecanismos imprescindible de garantía del sistema constitucional y legal".

Descarta una renuncia en bloque

Lesmes también descarta una renuncia en bloque de los vocales que se viene demandando desde algunos ámbitos tanto políticos como judiciales. Considera dicho comportamiento "irresponsable e inaceptable desde la perspectiva ciudadana y de la Carrera Judicial" pudiendo dar lugar además a responsabilidades.

"¿Qué pensarían los ciudadanos si todos los ministros de un gobierno en funciones decidieran colectivamente desertar de sus cargos, dejando a España sin Gobierno, como medio de presión al Parlamento en un proceso de investidura que se estuviese dilatando excesivamente en el tiempo?", se ha preguntado.

Para Lesmes, aunque la renuncia individual puede resultar admisible, "la renuncia colectiva no lo es", pues llevaría a la paralización total del Consejo" y de las funciones que la ley le encomienda. "Se ha insinuado incluso que de no hacerse así se estaría poniendo de manifiesto un comportamiento acomodaticio y poco responsable. Nada más lejos de la realidad", ha zanjado.