A Brasil se le vuelve a aparecer Coutinho

El Mundial de Rusia 2018 será recordado por las muchas sorpresas que se están produciendo en la fase previa. En el Brasil-Costa Rica (2-0) la 'canarinha' rondó la tragedia pero una vez más el jugador del Barça Philippe Coutinho desatascó el duelo y ante Serbia, el 27 de junio, jugará con cierta tranquilidad.

Costa Rica se jugaba el ser o no ser en el Mundial de Rusia 2018; Brasil, asegurarse el pase a la final. Así, con unas alineaciones con retoques mínimos ambos combinados arrancaron el partido con la calculadora en la mano, con una primera media hora de un fútbol lento.

La 'Canarinha' llevó la iniciativa, pero a medio gas. Costa Rica estaba agazapada, a la caza de un contragolpe definitivo, y Brasil no quería sorpresas.

De hecho, Una llegada de Gamboa hasta la línea de fondo por el carril del interior zurdo acabó en un pase de la muerte que Celso Borges remató demasiado cruzado (13'). Sin embargo, la advertencia estaba clara.

Al ralentí

Sin duda, esto hizo más prudente al combinado de Tite durante la primera media hora. El debutante Fagner pareció notar el peso del momento y su dupla con Willian por la banda derecha apenas aportó juego y sí los pocos espacios que encontraron los 'ticos'.

Mucho más activa se mostró el ala izquierda. El talento de Marcelo, Coutinho y Neymar permitió que Brasil estuviera cerca del gol cuando pisó tímidamente el acelerador en el último cuartro de hora del primer tiempo.

Las diagonales de Coutinho, las llegadas de Marcelo y las apariciones de Neymar cuando se pudo zafar de Venegas y Gamboa permitieron a la 'verdeamarelha' generar cinco buenas ocasiones que no resolvieron; incluido la reclamación de un penalti de Duarte sobre Paulinho que no existió.

A la carga

Tite tocó a rebato durante el descanso y Brasil, tras sustituir a Willian por Douglas Costa, arrancó el segundo tiempo con un acelerón espectacular. La pentacampeona rondó el gol una y otra vez y Costa Rica, con vida gracias a las paradas de Keylor Navas, se atrevió a contragolpear.

Primero Keylor abortó una ocasión de Neymar en boca de gol (48') y después, Gabriel Jesús remató de cabeza al travesaño y el rechace cayó finalmente a Coutinho disparó seco y raso pero Gamboa, milagrosamente, desvió a córner (49').

El susto de Costa Rica fue tal, que Óscar Ramírez reaccionó de inmediato (54') relevando a Ureña por Bolaños. Pero Brasil había acelerado y las apariciones de Paulinho en el área rival provocaron otras dos ocasiones de Neymar (56') y Coutinho (58') replicadas por sendas intervenciones de Navas, una vez más.

Más madera

El portero de Costa Rica se estaba convirtiendo en el protagonista y héroe del partido y Brasil no estaba dispuesto a permitir una sorpresa. Tite dispone de un caudal de talento ofensivo casi infinito, y no dudó en utilizarlo. Firmino entró por Paulinho (68') con lo que Coutinho retrasó su posición para ayudar más en la creación y dejar espacio al futbolista del Liverpool.

La resistencia de Costa Rica, pese a su orden y sacrificio, era cada vez más precaria. Un síntoma fue cómo Gamboa perdió el balón en la frontal (72') y Neymar dispuso de una nueva ocasión pero colocó en exceso su disparo. La respuesta del técnico costarricense fue cambiar a Gamboa por Calvo (75').

Piscinazo y var

Brasil dio ciertos síntomas de desesperación cuando el árbitro Kuipers tuvo que recurrir al VAR para desdecirse y no convertir en penalti una caída de Neymar ante Giancarlo González (78'). 

Brasil siguió dominando y llegando al área de Costa Rica, aunque cada vez un poco más ofuscado al comprobar como Keylor Navas y la mala suerte le privaban del premio del gol.

Aparece Coutinho

Los últimos minutos fueron agónicos, pero apareció de nuevo el blaugrana Philippe Coutinho para remachar una ataque más, ahora en el tiempo de descuento (90'+1') y certificar la victoria. Marcelo centró al área, dejó de cabeza Firmino, tocó Gabriel Jesís y Coutinho remachó con el alma un gol que espantaba los demonios de Brasil.

Neymar cerró el marcador ya en el minuto 97', con Costa Rica lanzada a la búsqueda de un empate imposible. El delantero del PSG solo tuvo que empujar la asistencia de Douglas Costa para firmar el 2-0.

Brasil respiró tranquila y celebró el triunfo casi como un título, mientras que Costa Rica recibía el castigo a su esfuerzo en los seis minutos de descuento y su partido contra Suiza ya es intrascendente. Eso sí, por oportunidades y por fútbol, la 'canarinha' mereció el premio.