Perú tembló de manera literal con el penalti señalado a Cueva

Cueva, desconsolado por su fallo, provocó un penalti y de paso un ismo en Lima

Cueva, desconsolado por su fallo, provocó un penalti y de paso un ismo en Lima / AFP

Andrés Fernández

El partido entre Dinamarca y Perú dejó un hecho insólito fruto de la pasión desbordada que viven los sudamericanos en su regreso a un Mundial 36 años después. Cuando se pitó el penalti del danés Poulsen, a la postre autor del único gol del partido, sobre el delantero incaico Christian Cueva, se activaron las alarmas sísmicas en Lima. Esa acción al final del primer tiempo provocó que se moviera el suelo, literalmente, de la capital peruana.

Así lo confirmó el geólogo Patricio Valderrama, quien usó su cuenta de Twitter para comunicar que la emoción por la pena máxima señalada ocasionó un sismo en Lima. Al final, Cueva no logró marcar desde los once metros y la alegría inicial se diluyó como un azucarillo.