Estados Unidos reVARlida el titulo

Miki Soria

Miki Soria

El campeón del mundo contra el campeón de Europa. Una auténtica constelación de estrellas que había derrotado a equipos del nivel de España, Francia e Inglaterra en su camino a la final contra un combinado ‘oranje’ que dio la sorpresa en la Eurocopa de hace dos años y quería superar su hazaña a pesar de no llegar con tanto brillo a la cita de Lyon. Todos los ingredientes estaban sobre el césped para disfrutar de la final de un campeonato que pasará a la historia por el auge del fútbol femenino y el espectáculo no defraudó aunque los goles tardaron en llegar y el VAR volvió a tener parte de culpa en el resultado final.

Van Veenendal salvó a Holanda

Estados Unidos saltó al campo convencida de su superioridad, pero a diferencia del resto de encuentros del Mundial, en los que siempre se había adelantado en el marcador antes del primer cuarto de hora, se topó con una Holanda que sabía a lo que venía: a estar bien colocada sobre el campo, no conceder facilidades en defensa y tratar de sorprender a la contra.

Por eso la primera ocasión clara no llegó hasta la media hora de juego, aunque en cuanto USA olió sangre no tardó en lanzarse a por su presa. Un derechazo de Ertz a la salida de un córner en el 30', dos centros de Rapinoe que remataron primero Mewis y después Morgan al poste en el 32’ y un disparo de la misma Morgan en el 36’ fueron salvados con éxito por una Van Veenendal que lo paró todo. Holanda logró aguantar y aún fue capaz de crear peligro a la contra y a balón parado en una recta final de primer tiempo apasionante.

El VAR volvió a ser decisivo

El inicio de la segunda mitad incrementó los nervios en uno y otro equipo. Holanda le cedía el dominio a Estados Unidos, pero las americanas no conseguían acercarse con peligro a la portería holandesa. Sin embargo, tampoco hizo falta. Igual que sucedió ante España, un penalti de VAR, controvertido y discutible –Van der Gragt golpeó a Alex Morgan en el brazo cuando la delantera ya no tenía opción de hacer nada en esa jugada sin que la árbitra viera nada en primera instancia- permitió a Rapinoe adelantar a la tricampeona del mundo en el marcador.

El gol provocó que Holanda diera un paso adelante, pero también generó más espacios en la retaguardia 'oranje' y eso lo aprovechó Estados Unidos para sentenciar el partido y el título. Rose Lavelle, la centrocampista con más calidad técnica del torneo, se inventó el 2-0 en una gran acción individual que cerró el partido, aunque Van Veenendal evitó varios goles más y Holanda no dejó de intentar la heroica.

No lo consiguió y el Mundial se volverá a ir a tierras americanas. Europa le plantó cara al imperio 'yankee’, pero Estados Unidos demostró que sigue mandando en el fútbol femenino. Al menos, durante cuatro años más, cuando las fuerzas estarán más igualadas.