La selección española alucinó con la afición

La afición arropó a los jugadores de Sergio Scariolo

La afición arropó a los jugadores de Sergio Scariolo / EFE

Àngels Fàbregues

Àngels Fàbregues

Marc Gasol estaba eufórico como no podía ser de otra manera durante la rúa que realizó la selección española por Madrid. El pívot catalán tuvo palabras de agradecimiento sobre todo hacia sus compañeros: “Estoy muy orgulloso del grupo, de como han trabajado, sin excusas, siempre tirando para adelante y creyendo en nosotros. Esto cuando hay dudas es importante. Te puedes coger a las dudas o tirar para adelante que es lo que hemos hecho nosotros”, dijo a los micrófonos de Mediaset.

Marc, que ha conseguido en Pekín su segundo Campeonato del Mundo,comapró ambos títulos: “Cuando eres joven todo va más rápido, tienes la testosterona disparada, ahora con 34 años lo puedes celebrar un poco más”. Gasol, que ha conseguido en una misma temporada ser campeón de la NBA y del Mundial, confesó que “yo no soy de bailar, soy más de barra”, dijo entre risas.

Confesó que el recibimiento “es alucinante. Ver la gente tan feliz como deportista es lo que más ansías. Ver a todo el mundo con esta ilusión y esta sonrisa en la cara vale más que una medalla de oro”.

Finalmente dio las gracias a todos los aficionados que han animado desde sus casas a través de sus televisores: “Muchas gracias a todos, sentimos desde lejos su apoyo y su cariño”.

Por su parte Xavi Rabaseda estaba en una nube: “Estamos alucinando con este recibimiento. Soñaba en ganarme un sitio y he podido cumplir un sueño”, aseguró el alero de Ripoll, quien confesó que “Somos campeones del mundo, algo que nunca imaginé”.

Otro de los grandes protagonistas de la noche fue Sergio Llull quien reconoció que “nunca esperas tanto cariño , estamos alucinando”, dijo para después reconocer que “hemos hecho algo muy grande y ahora con todo esto nos damos cuenta”.

El jugador del Real Madrid confesó que “teníamos una espinita clavada con Ricky y Rudy y la hemos podido sacar de la mejor manera”. 

Otro de los jugadores más felices por el título  era Willy Hernangómez, quien explicó los problemas con los que se encontraban al ser tan altos y desplazarse en un bus descapotable, pero restó importancia porque la celebración lo merecía: Estamos muy contentos de ver a tanta gente. Hay miles de personas por todas las calles. Muchas gracias”.

Oriola también estaba eufórico: “Es increíble, una pasada. Ojalá la noche sea muy larga”, dijo el jugador azulgrana quien añadió: “Al que llegue antes de las cinco, multa”, entre risas . “Agradecer a todos el apoyo. Ver todo un país volcado es una pasada”.