Sara Gallego debuta a lo grande en un Mundial pasando a semifinales

Aunque quizá ella todavía no lo sepa, Sara Gallego es ya a sus 21 una de las grandes figuras del atletismo español tanto por su calidad como por una capacidad competitiva al estilo de lo que suele ofrecer Asier Martínez en las vallas altas.

En su debut en unos Mundiales al aire libre tras estrenarse en pasado invierno en los de pista cubierta corriendo las dos vueltas a la pista, la prodigiosa atleta catalana realizó una sensacional carrera en las series de 400 metros vallas para terminar tercera y acceder por puestos a las semifinales con un registro de 55.09.

Además, la discípula de Àlex Codina se dio el gustazo de correr por la calle siete con la referencia de una de las mejores atletas del planeta, la estadounidense Sidney McLaughlin, actual campeona olímpica (400 vallas y 4x400) y poseedora del récord universal con unos siderales 51.41 que busca su primer oro mundialista en Eugene tras morder el polvo en Doha a manos de su compatriota Dalilah Muhammad.

Sara Gallego, quien ha borrado ya de las listas del histórico récord nacional de la canaria Cristina Pérez, contemporizó en la primera mitad de la prueba mientras se le iba McLaughlin y no se precipitó para cambiar en la entrada de la última curva y consolidarse en la segunda plaza. De hecho, incluso dejó llegar por delante a la reputada ucraniana Anna Ryzhykova.

McLaughlin se dio un paseo para imponerse con 53.95, seguida de Ryzhykova (53.93) y de Sara Gallego con 55.09 para asegurarse su presencia en unas semifinales que serán durísimas y en las que la española tendría que correr por debajo de 54 segundos para optar a seguir haciendo historia en la final.

"La verdad es que he salido un poco nerviosa e insegura. Me estaba dando rabia, pero sabía lo que me jugaba. A pesar de todo me he sentido bien, aunque no he tenido las mejores sensaciones encima de la valla. También estoy feliz por haber competido con las mejores y tener al lado a McLaughlin es una pasada", confesó tras su clasificación.

Al igual que sucede en categoría masculina con el campeón olímpico y recordman mundial Karlsten Warholm, Alison dos Santos y Rai Benjamin, en categoría femenina también rige una suerte de Santísima Trinidad con la referida McLaughlin, su también citada compatriota Muhammad y la portentosa neerlandesa Femke Bol.

Pues bien, Bol también ofreció una sensacional imagen para reinar en su serie con 53.90 y en la cuarta hizo lo propio Muhammad con 54.45, por lo que ambas no se verán las caras hasta una hipotética final en la que ojalá pueda estar Sara Gallego. Eso sí, donde luchará hasta por subir al podio será en el Europeo de Múnich del mes que viene.