Servià: "Este año echamos en falta a Alonso"

Oriol Servià, junto a los miembros de su equipo, esta semana en Indianápolis

Oriol Servià, junto a los miembros de su equipo, esta semana en Indianápolis / sport.es

Josep Viaplana

Josep Viaplana

Las 500 Millas de Indianápolis son una carrera con 102 años de historia, pero que en España la descubrió el gran público el año pasado con la presencia de Fernando, que tuvo un debut estelar. Oriol Servià correrá este domingo sus décimas 500 Millas, una prueba única y en la que el cuarto puesto de 2012 es su mejor resultado.

¿Qué supone para tí correr las 500 Millas de Indianápolis?

Participar y tener la oportunidad de ganar la carrera más grande que existe me llena de gran emoción. Llevo muchos años preparándome para esta prueba en concreto y llegar a ella siendo la mejor versión de mi mismo

‘La madre de todas las carreras’... ¿Por qué? ¿Qué es lo que las puede diferenciar de cualquier otro evento del motor?

Está carrera tiene muchas peculiaridades que la distinguen de cualquier otra. 102 años de historia. Un circuito oval que de hecho es un rectángulo creando dos recta muy rápidas unidas por 4 curvas a 90 grados muy difíciles y al límite. 33 participantes, siempre, y si hay más inscritos los más lentos se van a casa. Este año Hinchcliffe en pole en el 2016 no se clasificó y yo que el día del crono esperaba estar entre los 9 más rápidos casi no entro! Es muy competitivo. La carrera se corre a una media de 370km/h. Ah, y el día de la carrera habrá 400.000 espectadores en vivo y más de 250 millones de audiencia televisiva.

¿El mejor recuerdo? ¿el peor? ¿alguna asignatura pendiente?

Mi mejor resultado ha sido un cuarto y he partido desde la primera línea de la parrilla. Mi mejor recuerdo es cuando en 2011 justo a la mitad de la carrera me puse primero y lidere más de 20 vueltas, me di cuenta que si al final de la carrera había una tirada larga sin amarillas tenía coche para ganar, tuve una sensación muy especial, como he leído en otros deportistas en momentos especiales me sentí totalmente ‘in the zone’.

¿Qué se necesita para tener éxito en la prueba? ¿velocidad? suerte? ¿Dónde está la clave? ¿El momento más bonito y el más delicado?

Sí, Sí y Sí! Es una prueba larga, 500 millas, 7-8 paradas en el box, estrategia, velocidad, riesgo... Es un poco como Le Mans, el que gana tiene que tomar muchas decisiones acertadas todo le tiene que ir de cara.

¿Cuántas carreras vas a correr este año? ¿Estás en desventaja con un programa reducido?

Sólo corro esta carrera, pero no significa una gran desventaja.

¿Se echa en falta a Fernando Alonso en esta edición?

Claro, allí donde va Fernando crea un gran impacto, como es de esperar. Su participación el año pasado fue una sorpresa para para todo el mundo del motor y fue seguida al detalle por muchísimos medios de todas partes. Por mi parte me encantó tener la oportunidad de competir contra él en pista, ya que jamás habíamos coincidido.

¿Cómo fue tu experiencia con él en la última edición? ¿Crees que las 500 Millas fueron como vitaminas para él después de tres años difíciles en la F1?

Estuvo muy profesional y dedicado como era de esperar de un campeón como él. Su valentía sorprendió a muchos. No es sólo muy muy bueno, el ‘chaval’ es muy especial. Creo que disfrutó mucho de la carrera y del approach americano en general a las carreras. Apuesto a que volverá.

¿Habéis mantenido el contacto?

Se interesó de cómo era el nuevo indycar ya que yo hice el desarrollo el año pasado para el campeonato.

Cuando empezaste la aventura eres un niño... ¿Qué les dirías a todos estos niños que quieren abrirse camino en el deporte del automovilismo y que solo piensan en triunfar en la F1?

La F1 es el sueño natural de todo ellos y si lo quieren de verdad, pues que lo den todo para conseguirlo, ya que en el fondo creo que no hay mejor manera de “gastar” nuestras vidas. Solo un detalle, a veces vemos la F1 como la punta de la lanza del automovilismo, yo creo este deporte es como mínimo un tridente.