AUTOMOBILE BARCELONA

El Seat 600 y los futuristas Tesla, cara a cara en el Automobile Barcelona

El Automobile Barcelona permite pasear por el pasado admirando el Seat 600 y viajar al futuro con los Tesla.

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El Seat 600 es una de las atracciones principales en el estand de Seat. / MOTOR

Àlex Soler

Àlex Soler

El Automobile Barcelona es el escaparate perfecto para que las marcas presenten sus novedades al gran público y para que fabricantes exitosos en otros países entren en el mercado español o europeo. Algunos ejemplos de este hecho son Mahindra, con su intención de entrar gradualmente en EuropaMaserati, que no necesita presentación pero que quiere conquistar a un tipo de público determinado, o Tesla, habitual en las cabeceras de tecnología por su intención de ser la referencia del cambio del motor de combustion al eléctrico.

La firma estadounidense no ha elegido al azar este evento para darse a conocer en España, donde se comercializa desde el pasado diciembre. La transformación del Salón del Automóvil de Barcelona a Automobile Barcelona, y su apuesta por la tecnología y el futuro, ha venido como anillo al dedo al fabricante fundado por Elon Musk. Sin embargo, en la lucha por atraer al curioso, a Tesla le ha salido un rival inesperado, su antagonista en todo lo posible: el Seat 600. Casi mirándose, pues ambos estands están muy cerca, el mítico 600 desafía a los dos modelos de Tesla en el Salón. "El Seat 600 es un coche muy querido por todos", no duda en afirmar Ángel Lahoz, responsable de 'Show cars' y vehículos para salones de Seat

PASADO Y FUTURO, FRENTE A FRENTE

El Seat 600 representa el pasado, un vehículo instalado en el recuerdo de todos y uno de esos coches que arrancan una sonrisa cada vez que aparecen por los pensamientos de los españoles. "Todo el mundo viene y todos nos recuerdan que ellos, sus padres o sus abuelos habían tenido uno. Nos dicen que los suyos habían tenido alguna pieza distinta... Todo son anécdotas", explica Lahoz mientras observa contento el 600D descapotable expuesto en el salón. "Si no es el coche más querido de la automoción española, es uno de los más queridos porque permitió que mucha gente accediera a un vehículo. Es muy especial para nosotros", añade.

Su presencia en la muestra catalana no es fruto de la casualidad, pues este 2017 el Seat 600 cumple 60 años desde el inicio de su producción en 1957. Expuesto justo en el centro del estand de Seat, el pequeño vehículo contrasta entre la tecnología que le rodea. La firma de Martorell ha dispuesto un espacio dedicado a la realidad virtual, un simulador de coche del futuro y expone vehículos que, como el Seat León TGI, incorporan la última tecnología al servicio del conductor. Entre tanto futuro, destaca el pasado y, acertando con las expectativas, es uno de los puntos más visitados de la feria. "Está viniendo mucha gente y como está teniendo tanto éxito hemos puesto una máquina para que la gente se pueda hacer fotos con el coche", apunta Lahoz.

Por su parte, Tesla, en un estand mucho más pequeño que el de Seat, solo ha necesitado exponer tres vehículos, dos Model X y un Model S, para atraer a montones de personas. La misión autoimpuesta de la firma americana es ser la referencia de la propulsión eléctrica. Para ello presentan en España el Model S, una berlina coupé con una autonomía y unas prestaciones sorprendentes para un vehículo 100% eléctrico. De hecho, el deportivo representa un récord en la industria al ofrecer 632 km de autonomía que, según comenta un trabajador, "se suelen quedar en unos 500-550 reales". Lo sorprendente es su increíble aceleración, pues es capaz de hacer el 0 a 100 km/h en solo 2,7 segundos.

Al lado del deportivo, un SUV imponente se alza con las alas abiertas para llevarse a la mayoría público. El Model X sorprende con sus 565 km de autonomía y su igualmente increíble aceleración (0 a 100 en 3,1 segundos). Sin embargo, lo más llamativo es el acceso a sus asientos traseros mediante puertas de ala de gaviota. El Model X tiene siete plazas e, al igual que el Model S, incorpora la última tecnología disponible en el mercado. Es por eso que, una vez hipnotizados por su exterior, los curiosos quedan enamorados de los Tesla cuando se sientan en su interior y ven un habitáculo premium con una imponente pantalla de 17 pulgadas para gestionar todas las opciones del vehículo. Sin embargo, todo el lujo de los Tesla tiene un precio y, con la mejor batería posible, el Model S parte de los 162.400€ y el Model X de los 167.800

LISTOS PARA CORRER

Tanto los Tesla como el Seat 600 expuesto en el salón están listos para tomar la carretera y dejarse llevar. "Cuando circulas con un 600 las personas se giran cuando pasas", afirma Lahoz. Aun así, la reacción de un peatón cuando ve pasar un Model S es la misma. Ambos vehículos, tan diferentes, de épocas tan distantes, terminan por obtener el mismo resultado por parte de los que los ven pasar. Mientras que subido a un Tesla, el conductor se transportará al futuro donde, incluso, se podrá relajar gracias a la conducción autónoma, con el 600 del salón viajará al pasado y sentirá lo que sintieron miles de españoles durante los 50 y 60 gracias a la completa restauración a la que ha sido sometido. "Se ha revisado el 100% del coche, absolutamente todas las piezas. Así, la pieza que se ha podido recuperar se ha recuperado y la que no ha sido sustituida por recambios originales. La única modificación está en la pintura, que anteriormente era mate, y en el interior, donde hemos puesto piel de muy buena calidad", explica Lahoz antes de apuntar que después del salón se terminará de poner a punto para que vuelva a rodar.

El Automobile Barcelona, y su apuesta por el futuro, ha permitido que los visitantes entren en un verdadero túnel del tiempo donde explorar el pasado nostálgico, con Seat 600, el presente, con Ateca FR y el futuro, con la exposición de Tesla.