Palou, hundido por su KO en Indianápolis: "Mi corazón se rompió en pedazos"

Alex Palou, segundo el año pasado en las 500 Millas de Indianápolis, tuvo ayer una ocasión de oro para hacerse con la victoria en la prueba reina del automovilismo en Estados Unidos, pero tras su gran clasificación, que le situó segundo en parrilla, y después liderar la primera parte de la carrera intercambiándose con su compañero Dixon para ahorrar combustible, recibió una penalización cuando se vio obligado a adoptar el servicio de repostaje emergencia, que le envió al puesto 32º. Logró remontar para terminar noveno, pero muy tocado anímicamente.

“Me divertí mucho en esta carrera, pero hubo un punto en el que mi corazón se rompió en pedazos" explicó Palou, que lideró 47 vueltas y vio como se esfumaba un triunfo que creía seguro. "Después de la sanción seguimos adelante y logramos un buen resultado al final. Estoy orgulloso del equipo y muy orgulloso de que Marcus Ericsson, mi compañero de equipo, ganase la carrera. Simplemente nosotros no tuvimos la suerte que necesitábamos", resumió el piloto catalán.

"Teníamos un coche realmente fuerte y estábamos sacando todo de él. Tuve que trabajar mucho, fue súper difícil remontar desde ahí. Fue la mayor cantidad de adelantamientos que he hecho en una carrera en un óvalo, así que estoy feliz de haber remontado. Al final, simplemente no podría haber hecho nada diferente con ese periodo de bandera amarilla, así que estuve en el lugar equivocado, en el momento equivocado. Volveremos el próximo año", prometió Palou.