CAZADORES DE VELOCIDAD

La DGT recauda 164 millones de euros en multas gracias a los radares

En cinco años, la cifra ha aumentado un 37% mientras se debate sobre su eficacia.

El radar espera a que alguien pase más rápido de lo que debería.

El radar espera a que alguien pase más rápido de lo que debería. / MOTOR

Àlex Soler

Àlex Soler

4,3 millones de conductores fueron multados en España en 2016. En total, según confirma Tráfico, la DGT ganó 162 millones de euros procedentes de las multas por exceso de velocidad. Desde 2012, año en el que se recaudaron 120 millones, la cifra ha aumentado un 37% mientras Interior confirma que instalará 60 nuevos cinemógrafos y el debate sobre su objetivo se enciende cada vez más.

En el global de multas que puso la DGT el año pasado, las relacionadas con el exceso de velocidad supusieron el 41,5% del total. Una cifra que no ha hecho nada más que aumentar en el último lustro (en 2013 eran el 29,7%). Este crecimiento viene marcado por la reducción de otros tipos de sanciones, como las denuncias por conducir ebrio, ya que cada vez menos personas conducen en este estado. 

¿POR QUÉ AUMENTA TANTO?

El incremento de multas por exceso de velocidad ha aumentado desmedidamente por dos razones. La primera, según Tráfico, es por el aumento número de desplazamientos de largo recorrido. En 2016, los conductores hicieron 392 millones de trayectos largos con su vehículo, un 5% que el año anterior y un 9% que en 2014.

La otra causa es el traslado, por parte de la DGT, de los radares móviles a las carreteras secundárias donde se producen la mayoría de las víctimas mortales en accidente de tráfico. 

EL DEBATE

Mientras se registran récords en número de sanciones, la opnión acerca del objetivo y eficacia de los radares es cada vez más negativa. La colocación de los aparatos sirve como función didáctica, es decir, la intención es que se ubiquen, y se señalicen correctamente, en zonas peligrosas para que los conductores las reconozcan y moderen su velocidad en los puntos críticos. Sin embargo, el aumento de radares mal señalizados, o no indicados, dispara la opinión sobre el afán recaudatorio de los mismos. Según una encuesta de la Fundación Línea Directa en 2015, un 92% de los conductores cree que las multas de tráfico tienen como objetivo principal sacar dinero.

A los argumentos que creen que el uso principal de los radares es recaurdar dinero en vez de para educar y prevenir accidentes, se suman los que creen que el aumento de multas significa que los aparatos no consiguen su cometido y que se debería reformular la política de radares en España.

LOS QUE MÁS MULTAN

Andalucía es la comunidad autónoma que sale más perjudicada por las multas por exceso de velocidad. Concretamente, el radar fijo situado en el km 417,5 de la carretera A-4, en la provincia de Córdoba, sacó 80.582 fotos de conductores pisando de más el acelerador y estableció la marca más elevada del país. 

El cinemógrafo del kilómetro 10,4 de la carretera MA-20, en Málaga, y el de la A-44, en Jaén, acompañan al de Córdoba en el top 5 de los radares que más multan en España.