Prevención de accidentes

Barcelona estudia la instalación de radares en las zonas 30

El consistorio trabaja en un nuevo de control de velocidad en el Túnel de la Rovira

Zona de circulacion limitada a 30 km h en el Passeig Salvat Papasseit de la Barceloneta

Zona de circulación limitada a 30 km/h en el Passeig Salvat Papasseit de la Barceloneta / periodico

Luis Benavides

La concejala de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Rosa Alarcón, ha explicado este viernes que el consistorio estudia la instalación de radares en las zonas limitadas a 30 kilómetros por hora con el objetivo de mejorar la convivencia en la calzada de los diferentes modos de transporte y reducir así el número de accidentes de tráfico. “Si conseguimos bajar la velocidad será mucho más fácil que todos nos respetemos mejor y que podamos convivir (en la calzada) sin tener que hacer tantas segregaciones de espacio para la movilidad”, ha explicado Alarcón.

La responsable de movilidad del gobierno municipal también ha detallado que ya se está trabajando en un nuevo tramo con radar en el Túnel de la Rovira. "Para el resto, estamos estudiando dónde y de qué forma instalaremos los nuevos radares que nos permitirán controlar mejor la velocidad", ha dicho en declaraciones a los periodistas durante el 25 Fòrum de Seguretat Viària."Se ha demostrado que donde hay radares -ha añadido- el número de accidentes baja exponencialmente". En ese mismo contexto, el teniente de alcalde de Seguridad y Prevención de Barcelona, Albert Batlle, ha defendido una "apuesta clarísima en Barcelona por las zonas 30", y ha dicho que en su opinión todas las calles con un solo carril de circulación deberían estar limitadas a esa velocidad.

En las calles principales de la capital catalana, la velocidad está limitada a la máxima genérica en vía urbana de 50 kilómetros por hora, y las calles secundarias --la conocida como 'red no básica'-- están limitadas a 30 kilómetros por hora, excepto un 10% de ellas. Alarcón ha defendido que se puede ampliar la zona 30 a ese 10% restante de calles secundarias, "pero lo que es importante" es que se respete el límite de velocidad donde ya está establecido.  

"Medidas impopulares"

Uno de los objetivos de la movilidad en la ciudad prioritarios es reducir la velocidad y no solo creando más calles 30, ha puntualizado Alarcón, sino mejorando la disciplina en este sentido. "Esto implica medida impopulares como nuevos radares y el trabajo conjunto que hacemos con la Guardia Urbana. Igual que tenemos la disciplina en el aparcamiento, y de hecho sabes que si aparcas mal te vendrá un agrúa o ten pondrán una multa, debemos tener la misma disciplina con la velocidad", ha subrayado la concejala. Alarcón considera que la limitación permitirá mejorar la convivencia "en los 100 kilómetros cuadrados en los que vivimos 1,7 millones de personas". 

La concejala de movilidad ha recordado durante su parlamento en este foro sobre seguridad vial, en el que también han participado el presidente del RACC,  Josep Mateu, y Jorge Ordàs, responsable de Movilidad y Tecnología de la Dirección General de Tráfico (DGT), entre otros, que "el peatón debe estar en el centro" de la política municipal del Ayuntamiento. "Hasta la fecha llevamos 18 muertos -victimas de accidentes de tráfico- en la ciudad de Barcelona, que no son tantos como en los noventa, pero mientras haya solo una persona herida grave o muerta en un accidente de tráfico debemos luchar para evitarlo", ha añadido.