REPORTAJE Rodibook 2015

Rodibook 2015 'Motomasoquismo'

Experimentamos más de 14 horas en moto por carreteras secundarias

EN BUENA COMPAÑIA. Sin ninguna duda, unas de las claves para finalizar con éxito el viaje es formar un buen grupo.  De izquierda a derecha, Miquel, Kim, Iolanda, David, Rafa y Edu. La pareja formada por Iolanda y Miquel fueron los auténticos líderes

EN BUENA COMPAÑIA. Sin ninguna duda, unas de las claves para finalizar con éxito el viaje es formar un buen grupo. De izquierda a derecha, Miquel, Kim, Iolanda, David, Rafa y Edu. La pareja formada por Iolanda y Miquel fueron los auténticos líderes de nuestra formación.

KIM SALOMON / Vielha

Masoquismo es un término que describe la actitud de una persona que busca el placer a través del sufrimiento. Esta es una de las muchas definiciones que aparecen en el diccionario. Ahora tendríamos que definir la palabra motomasoquismo. Pues podría ser lo que se siente después de completar con éxito la excitante Rodibook 2015. Una jornada que empezó a las 6.30 horas (de noche) y terminó a las 21.15 (de noche) completando los 644 kilómetros del recorrido por carreteras de todo tipo. De las catorce horas del viaje, 12 fueron encima de la moto.

Desde luego esto es una hazaña y para conseguir terminar con éxito hacían falta dos cosas. La primera, ser un experimentado motorista con muchas ganas de hacer kilómetros, y la segunda, buscarse unos buenos compañeros de viaje. En nuestro caso, la primera de estas dos cosas quedó un poco en entredicho, pero la segunda se cumplió con creces. Esta fue la cuarta edición de la Rodibook, que consiste en cubrir una ruta sorpresa en moto por carreteras abiertas al tráfico, siguiendo las indicaciones de un libro de ruta o roadbook sin ninguna pretensión competitiva. Cada moto llevaba un roadbook que indicaba el camino (kilómetro recorrido, dirección a seguir y observaciones), como si estuvieran en el Dakar, es decir, con el libro de ruta enrollado y guardado en una caja instalada sobre el manillar mediante un soporte y haciéndolo avanzar para seguir más indicaciones girando un rodillo. Una de las novedades de este año, que contó con la presencia de Àlex Márquez, fue la posibilidad de hacer dos tramos (opcionales) de off road.

En el 2014 se limitaron las plazas a 300 inscritos. Este año la organización, con Jordi Esteve como impulsory con la complicidad del exdakariano Fernando Búfalo Gil, ampliaron hasta 500 la lista de participantes, que en 10 días se agotaron. Todo empezó el viernes por la tarde en la plaza Nova de Vielha con las verificaciones de las motos, la entrega del rutómetro a los participantes y un breefing para conocer todos los detalles sobre la primera jornada.

El sábado tocó madrugar. La salida se empezó a dar a las 6.30 horas y cada 30 segundos salían cuatro motos. Cada participante tenía una hora de salida, así que los que iban en grupo solo tuvieron que esperar en un punto para seguir juntos. En el parque cerrado entre la gran variedad de marcas y modelos de motos, sin ninguna duda, las BMW tipo trail ganaban por goleada, aunque también pudimos ver a dos Montesa Impala clásicas, una Vespa primavera y un triciclo Can-Am Spyder.

En uno de los sitios más recónditos de la ruta pasamos por el primero de los dos controles secretos. Después de coronar el Col de Montsegur seguimos unos 40 minutos más hasta llegar a Ax-les-Thermes, donde paramos a comer. Llevábamos más de seis horas de viaje. Nos habíamos ganado la comida. Las fuerzas empezaron a flaquear y los kilómetros pasan factura. Pero la belleza de los paisajes, la búsqueda de nuevas carreteras y la pasión por la moto nos hicieron seguir. En esta ocasión AIRBAG tuvo la oportunidad de hacer la ruta con una BMW GS 1200, seguramente una de las mejores motos para hacer este tipo de recorridos, que te hacen disfrutar de cada curva, de cada frenada. Es una máquina que seduce por sus prestaciones y sensaciones.

El sol empezó a bajar y la temperatura también. A las nueve de la noche aproximadamente conseguimos llegar a la meta, donde nos pusieron el último sello en nuestro carnet. Es en este momento nos dimos cuenta que habíamos disfrutado sufriendo. Todos los participantes se abrazaron, cansados, fatigados, pero felices. Sonrisas sinceras, abrazos sentidos y todos posaron orgullosos con su diploma en el foto-

call. ¿Es motomasoquismo?