Quartararo cree que Márquez puede ser campeón

Fabio Quartararo, campeón de MotoGP

Fabio Quartararo, campeón de MotoGP / motogp

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

El Mundial de MotoGP ha empezado alocado, sin control, incierto, emocionantísimo, pero desconcertante. Las lesiones que sigue padeciendo el campeón catalán Marc Márquez (Honda), a quien todos, todos, reconocen una autoridad incuestionable cuando está bien (“Marc está un punto por encima de los demás”, confesó, el domingo, Alberto Puig, responsable deportivo del equipo Repsol Honda), y el pobre papel protagonizado hasta ahora por los dos grandes protagonistas de la temporada pasada, el campeón francés Fabio Quarataro (Yamaha), de 22 años, y el italiano ‘Pecco’ Bagnaia (Ducati), ha permitido que el italiano Enea Bastianini (Ducati), ganador en Qatar y EEUU, el portugués Miguel Oliveira (KTM) y el catalán Aleix Espargaró (Aprilia) sean los triunfadores de las cuatro primeras carreras.

Marc, aún favorito

El ‘Diablo’, que reconoce poseer una Yamaha inferior, especialmente en potencia, velocidad punta y agarre, al resto de motos oficiales, incluidas, sí, sí, las poderosas Aprilia y Suzuki, reconoce que es frustrante ser el campeón y saber, como le ocurrió en la última carrera en Austin (Texas, EEUU), que “sales sabiendo que no vas a poder pelear por la victoria y debes conformarte, como hice yo, en tener una pelea preciosa con Marc (Márquez) en las últimas vueltas, en las que Marc me impidió acabar sexto”.

Quartararo, que espera que, llegado el Mundial a Europa (los equipos están ya totalmente instalados en el precioso trazado de Portimao), Yamaha le pueda suministrar algo más de potencia y ‘grip’, ha reconocido que el campeonato ha tenido un arranque tan incierto que “Marc, si logra dejar atrás sus lesiones, sigue siendo uno de los grandes favoritos al título, pues ya vemos cómo es capaz de competir sin estar a su mejor nivel, ni físico ni, tal vez, mental, y adaptándose aún a su nueva Honda”.

El italiano Enea Bastianini (Ducati Gresini) llega a Europa como líder del Mundial de MotoGP.

El francés, nacido en Niza y desde su ascenso a MotoGP gran admirador del campeón catalán (“es ha sido siempre mi referencia”), considera que “de luchas como la que mantuvimos Marc y yo en las últimas vueltas de Austin, circuito donde Márquez es el rey, aprendí muchas más cosas que de alguna de las carreras que he ganado. Competir con Marc, carenado contra carenado, es uno de los placeres de ser piloto de MotoGP”.

Bagnaia, desconocido

El desconcierto que rodea la actuación de Bagnaia, uno de los poquísimos pilotos, junto a MM93, que tienen ya contrato para los dos próximos años, es tremendo y, de momento, al margen de un pequeño choque de criterios a la hora de probar o no probar piezas durante los fines de semana, lo cierto es que ‘Pecco’ no acaba de dar con la tecla de su nueva moto que, por cierto, finalmente está equipada, por expreso deseo suyo, con el motor de la ‘Desmosedici’ del pasado año.

Algo menos desconcertante, es verdad, es el papel que está teniendo el ‘Diablo’ francés, sin duda todo un campeonísimo, capaz de conquistar el cetro, el pasado año, sin tener, ni mucho menos, la mejor moto, que sigue siendo la Ducati. Quartararo, cuya moto en rectas de un kilómetro como la de Austin (Texas, EEUU), del pasado fin de semana, pierde hasta 10 kms/h. con respecto, no ya solo a la impresionante ‘Desmosedici’ sino también a la Honda y, ahora, incluso con respecto a la Suzuki, se defiende panza arriba como puede y se mantiene en el quinto puesto de la general, a 17 puntos de ‘La Bestia’ Bastianini.

Yamaha, sin potencia

“¿Si la moto está lista para poder aspirar a renovar el título?”, se pregunta Quartararo. “Tengo mi opinión, pero yo doy todo el tiempo mi 100%, en cada entrenamiento y en cada carrera”. Es evidente que la respuesta, sin palabras, es que la Yamaha M1 actual no está lista según su principal piloto, que está absolutamente solo ante el resto de compañeros de otras marcas. “Deberemos esperar, por ejemplo, trazados como Jerez, para aprovechar las condiciones de nuestra moto. Es evidente que nos falta potencia y es evidente que va a ser difícil encontrarla en lo que resta de temporada”.

Quartararo, un piloto que ha elogiado tremendamente a Marc Márquez (“su ausencia nos hace mucho daño a todos, pues él ha sido, al menos para mí, la referencia en MotoGP”), asegura que la pelea que mantuvo con el ocho veces campeón de Cervera (Lleida) “volvió a ser toda una lección, en el sentido de que aprendo más peleando con él, aunque sea por la sexta plaza, como hicimos el domingo en Austin, que de muchos grandes premios que he acabado ganando”.

Fabio puede volvar

Es evidente que Quartararo sabe que, de momento, está en inferioridad de condiciones con respecto, no solo al resto de marcas, sino también al resto de favoritos. Y, en ese sentido, el ‘Diablo’ tiene la esperanza de que cuando lo tenga todo a punto, si es que consigue tenerlo, “podré pelear por las victorias”.

Los 2.000 habitantes del 'paddock' siempre dicen que el auténtico Mundial empieza en Europa, pero lo cierto es que la 'Bestia' Bastianini parece un líder sólido, con dos victorias en las cuatro primeras carreras y ya suma, por ejemplo, 17 puntos más que el campeón Quartararo, 38 más que el subcampeón Bagnaia y 40 más que el ocho veces campeón del mundo Marc Márquez, Cierto, restan aún 17 grandes premios, es decir, quedan 425 puntos aún en juego.

Portimao, el lugar de grato recuerdo para MM93

"Estoy deseando correr en Portugal, es un circuito exigente y muy físico, pero muy divertido", ha comentado Marc Márquez, que viene de protagonizar una remontada impresionante en uno de sus circuitos preferidos, Austin, en Texas, donde ha ganado siete de las últimas nueve carreras disputadas allí.

Portimao, el precioso trazado de Portugal, es el sitio donde MM93 regresó a la actividad, el pasado año, tras nueve meses de viacrucis. Ya entonces se mostró tremendamente competitivo desde el minuto uno del FP1 del viernes y acabó la carrera en séptima posición.

"En Estados Unidos", prosigue comentando el campeón de Cervera (Lleida) antes de partir hacia Portimao, "demostramos nuestra velocidad y de lo que somos capaces, aunque no todo salió a la perfección. Quiero volver a estar luchando delante y conseguir buenos resultados después de no haber empezado el año de la mejor manera. Tenemos que seguir trabajando en nosotros mismos y en la moto para poder alcanzar nuestro máximo, pero sé que tanto yo como Honda estamos mejorando".