Miller: "Las siete u ocho últimas vueltas se me han hecho eternas"

Jack Miller se ha sacado una espinita. Victoria en el Circuito de Jerez-Ángel Nieto en condiciones de seco, dando un golpe sobre la mesa tanto en la parrilla como en el box del Ducati Lenovo. Y es que Francesco Bagnaia, que por cierto es nuevo líder del Mundial tras el bajón casi incomprensible de Fabio Quartararo, le estaba ganando la partida en el equipo oficial de la fábrica italiana este inicio de curso.

Estaba cuajando una muy buena carrera 'Jackass'. Segunda posición y siendo el único que le estaba pudiendo plantar algo de cara a Fabio Quartararo. Pero 'El Diablo' sufrió algún tipo de problema que rebentó su carrera. Y ahí estaba Miller para aprovecharlo. Le superó sin tener que hacer demasiados esfuerzos y a se fue en solitario hacia la victoria. Su segundo triunfo en MotoGP. Ha tenido que esperar prácticamente cinco años a sumar esa segunda victoria tras la lograda en Assen la temporada 2016 sobre mojado.

"La verdad es que he tratado de hacer todo lo posible. He hecho muchas vueltas solo a lo largo del fin de semana y sabía que tenía un buen ritmo", comentó en el parque cerrado para iniciar su intervención el bueno de Jack. "Cuando me ha pasado Fabio he visto que se iba a ir, luego ha tenido ese problema y no pensaba que iba a perder tantas posiciones. Me he puesto primero y he intentado mantener esa ventaja que tenía respecto a 'Pecco'", añadió el australiano.

Visiblemente emocionado, Miller reconoció que "las siete u ocho últimas vueltas se me han hecho eternas. Han sido las más largas de mi carrera. No puedo describir exactamente lo que siento. Me gustaria poder celebraro aquí con mis padres pero no han podido venir. Están en casa y nada, espero que estén tan felices como yo".