KTM capea el temporal y evita la quiebra

El futuro de KTM está asegurado, al menos de cara a los próximos meses. Este martes era el día marcado en rojo en el calendario del constructor austríaco y después de una larga reunión los acreedores aprobaron en el tribunal regional de Ried im Innkreis (Alta Austria) el plan de reestructuración, así como la cuota inicial del 30%.

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Tras una larga reunión de varias horas y cerca de un centenar de personas, entre ellos Gottfried Neumeister, CEO de KTM, y Stefan Pierer, Co-CEO de la compañía, los acreedores aceptaron el plan de reestructuración de KTM AG y dos filiales, que se asegura de esta manera continuar su actividad, al menos, hasta el mes de mayo.

El plan establece que los acreedores recibirán el 30% de las deudas mediante un pago único antes del 23 mayo de 2025, una cantidad que se estima en 548 millones de euros, de los cerca de 2.200 millones de euros que alcanza la deuda total.

"Para cumplir la cuota del 30%, KTM AG deberá depositar un importe de 548 millones de euros ante el administrador de la reestructuración a más tardar el 23 de mayo de 2025. A continuación, el tribunal confirmará el plan de reestructuración a principios de junio de 2025. El procedimiento de reorganización de KTM AG se completará cuando sea legalmente vinculante", reza el comunicado difundido por Pierer Mobility AG.

Inversores y posibles comparadores

El administrador concursal explicó que la compañía cuenta con inversores estratégicos que van a inyectar dinero para asegurar la continuidad de la actividad de la compañía. Aunque no se ha desvelado el nombre de dichos inversores, parece que son CFMoto y Bajaj Auto los que aportarán este balón de oxígeno a KTM. Una aportación de capital de dos estrechos colaboradores de la compañía austríaca con la que se podrá volver a poner en marcha la producción en la fábrica de Mattighofen (Austria) este mes de marzo.

En un plazo de tres meses, se espera poder recuperar la producción anterior al parón de la actividad el pasado mes de diciembre, con las cuatro líneas de producción trabajando a pleno rendimiento, según indicó la nota oficial de la empresa. La operación costaría unos 150 millones de euros, 50 de los cuales, los que servirían para cubrir el mes de marzo, habrían sido ya depositados.

En los últimas horas se había rumoreado que BMW podría entrar en la ecuación como comprador de la compañía austríaca. Según apuntó el medio austríaco 'ae24.at', BMW quiere comprar y continuar con la marca KTM, aunque trasladaría la investigación y el desarrollo a Alemania y la producción a la India, con lo que se despedirían a todos los empleados en Austria. Por el momento, con la aceptación del plan, este posible movimiento ha quedado en segundo plano.