GP Catar

El duelo Rossi-Márquez eclipsa la incontestable victoria de Lorenzo

El campeón no dio opciones en una carrera en la que quedó claro que Valentino está de vuelta y Marc es un candidato serio al título

Laura Ramos

Este Mundial de MotoGP había generado muchas expectativas, como hacía tiempo que no sucedía, y visto lo visto estaban más que justificadas. Cuatro hombres, cinco si se incluye a Cal Crutchlow, pelean por el trono que Jorge Lorenzo empezó a defender con contundencia con una victoria fácil, seguramente mucho más de lo que él mismo pensaba.

El campeón sacó el martillo de la mochila y puso tierra de por medio desde la primera vuelta. Salió bien, le cerró la puerta a Dani Pedrosa y empezó a rodar en tiempos imposibles para el resto. Valentino Rossi se dio cuenta de ello y, en un intento por seguir a su compañero de equipo, se fue largo. Eso le relegó a la séptima posición. Se topó con Bradl y perdió un tiempo que a falta de nueve vueltas parecía imposible de remontar... pero Rossi no es de los que se rinden.

A lo lejos, el nueve veces campeón del mundo veía como Dani Pedrosa comandaba un trío en el que se encontraba Cal Crutchlow y Marc Márquez. El de Cervera pagó la inexperiencia y salió mal, le tocó remontar como a Valentino, pero en cuanto conectó con ambos dejó claro que no se iba a conformar con ser cuarto en su primera carrera en MotoGP. Pasó al británico como el rayo con una frenada in extremis que dejó sin reacción a la Yamaha satélite del Tech3 y se enganchó a su compañero de equipo.

Márquez, que en Moto2 ya demostró ser un piloto muy inteligente, estudió a Pedrosa durante unas vueltas. Siguió su rueda como no pudo hacer el sábado y lo intentó una vez. Nada. Volvió a esperar y a falta de seis vueltas no dio opción a la répica. Apretó fuerte, quién sabe si porque le avisaban que llegaba Valentino Rossi como una exhalación. Cogió unos metros de ventaja y dejó que el italiano se peleara con Crutchlow y Pedrosa. Le duraron apenas una vuelta y ambos se enfrascaron en un intercambio de golpes corto, pero intenso que eclipsó la incontestable victoria de un Lorenzo que rodaba a siete segundos de sus perseguidores.

Rossi adelantó a Marc, Marc no se empequeñeció ante Valentino y le devolvió el ataque. La experiencia, sin embargo, acabó por imponerse. "Es un hueso demasiado duro de roer, tiene mucha experiencia. Solo espero llegar a su nivel poco a poco", reconoció un más que satisfecho Márquez al bajarse de la moto. Lo había conseguido. Como Lorenzo y Pedrosa subía al podio en su primera carrera en la categoría reina. El de Castellar, sin embargo, no estaba feliz. En la primera batalla había quedado fuera de combate. El Mundial será duro para todos y empezar bien era fundamental. El podio llena de moral a sus integrantes, que se jugaban mucho en el circuito de Losail. La próxima parada será Austin, un circuito desconocido para todos y en el Márquez ya demostró de lo que era capaz. Como en Catar. No sabe lo que es el miedo ni el respeto. Si puede, buscará la victoria.