Àlex Márquez: "Cualquiera que se compare con Marc sale perdiendo"

Ya van cinco ediciones del Campus Allianz Júnior, pero el que ha presentado este viernes Àlex Márquez en el circuito de Rufea (Lleida), tiene un sabor especial. Es el primero que el joven campeón del mundo de Moto2 dirige tras estrenarse como piloto oficial Honda en MotoGP. Y también el primero que asume en solitario, sin la compañía de su hermano Marc, que hace tan solo tres días se sometió a una delicada intervención en su hombro derecho.

“Marc está bien. Siente no poder estar aquí, le habría gustado. El año pasado quiso retrasar un poco la operación del otro hombro para poder participar en el campus, aunque supongo que los niños le podrán ver estos días algún ratito”, ha explicado Àlex.

El piloto de Cervera, de 23 años, no puede ocultar su ilusión por el espléndido final de curso que ha protagonizado, tanto por su título como por el salto a la clase reina: “Esta temporada ha sido muy buena. Increíble. El objetivo era ganar el titulo y dar el máximo, y se ha cumplido. Después de cinco años en la categoría este año lo teníamos todo a favor. El grupo estaba muy unido, aunque al principio no llegaban los resultados y yo les decía: solo faltan detalles. Luego mejoramos, llegaron las victorias y al final vino la presión. De eso también se aprende. Una experiencia para otros años… ojalá vuelva a tener ese problema”

“Todo pasa muy rápido y ya parece que el mundial de Moto2 sea del año pasado. Mi situación era seguir Moto2, lo decidí en verano, pero la inesperada retirada de Lorenzo vino de golpe y se presentó una oportunidad que no podía desaprovechar”, ha comentado Àlex sobre el fichaje por el Repsol Honda.

Tras debutar con la Honda en los ensayos post temporada de Valencia y Jerez, la conclusión de Àlex es que “todavía hay mucho que pulir, pero hay signos positivos”. Explica que “los test han ido  bien, he podido conocer y hacer piña con todo equipo, que es importante. En Jerez ,con más temperatura en pista, las cosas salieron mejor que en Cheste, vamos por buen camino”.

A mitad de temporada, Jorge Lorenzo pidió muchis cambios a Honda y Àlex asegura que “se trataba de cosas relativas a la posición, a ir cómodo en la moto”, que a él no han hecho falta, de momento. “Yo estoy utilizando todo lo estándar , al menor hasta tener más claro lo que necesito. La sensación que me esperaba era peor porque la Honda es pequeña, pero de entrada me sentí muy bien de posición”.

¿La Honda es tan difícil para un rookie como dice Marc? Le insisten: “Bueno, por ahora todo va bien, es verdad que cuando vas buscando el límite ya se ve que en algunas curvas es un poco crítica en las curvas, el tren delantero es complicado y me falta un pelín de confianza pero en  Jerez ya con mi nuevo técnico Ramón Aurin todo fue mejor,  hubo destellos… hasta Marc me lo dijo”.

Àlex no considera precipitado su salto a MotoGP con la Honda: “Después de cinco años en Moto2, esto llegó muy rápido, con lo de Lorenzo, pero yo me siento preparado para el reto y sé que de entrada no será fácil. Estoy dispuesto a poner todo de mi parte para que todo salga bien”, advierte.

“En MotoGP el nivel es muy alto, hay mas exigencia en esta categoría, pero me siento preparado y no me lo pensé ni un minuto cuando me lo propusieron”, añade. “Ahora  hay que trabajar en pretemporada, hacer lo mejor que podamos en los  test y luego ya veremos a qué podemos aspirar a partir de la primera carrera de Catar. Sabía desde el primer momento todo lo que implica dar este paso y no me marco objetivos de entrada. Después de ganar título en Moto2 el salto natural es ir a MotoGP y  más si puedes hacerlo con el mejor equipo de la parrilla” subraya el menor de los Márquez.

Àlex no considera que el hecho de firmar un año contrato le condicione: “Mucha gente me dijo es buena oportunidad pero solo un año… Yo no lo pienso. El objetivo es el mismo, dar lo mejor de ti, intentar ser competitivo. El contrato de un año no ha de afectar el rendimiento”.

Sobre la evolución de la Honda 2020, el campeón de Moto2 recuerda que sólo ha probado la de 2019 y apunta que el desarrollo corresponde a “Marc y Cal Crutchlow”. Entiende que “Honda se centra en motor y chasis, quieren dar la mejor moto posible a sus pilostos. Yo he probado la 2019 y el feeling con la moto es totalmente nuevo, este año el motor no estaba mal, pero en chasis crutchlow y Lorenzo sí apuntaron que había margen de mejora”.

Una vez más le preguntan por la presión extra que tendrá que aguantar el próximo año compartiendo box con el mejor, su herma no Marc, ocho veces campeón del mundo. Àlex, acostumbrado a lidiar con el apellido desde que debutó en e Mundial,  no le da importancia. Está curtido: “No me preocupa el tema, creo que todos pilotos salen perdiendo en comparación con Marc y yo debo intentar hacer mi camino . Sí es verdad que en el mismo box, viendo la telemetría podré aprender todos los puntos fuertes de Honda, no solo fijándome en Marc sino en todos los pilotos Honda”, señala.

Sobre los consejos que le ha dado su hermano en MotoGP, asegura que “es difícil hablar con él durante los test, aunque algún consejo si me ha dado, en Valencia el primer día hacía líneas de trazada de Moto2 y me iba mucho a la derecha y me insistió en corregir eso y en lo de levantar la moto, se ha de pulir todo un poco. Hay mucho trabajo por delante”.

Asegura, eso si, que no habrá rivalidad en el box: “Tenemos objetivos diferentes. No tengo experiencia en la categoría y el es campeón. Cada uno estará centrado en lo suyo. La rivalidad en el box es muy diferente cuando cada uno tiene objetivos tan diferentes”.

También quiere dejar claro que Repsol Honda no le ha marcado objetivos mínimos: “Les estoy muy agradecido porque me han dado una bonita oportunidad, me han dicho que haga mi trabajo y me olvide del resto , de la presión de ese box y que me centre en lo mío”.