Joaquim Fenoy: El reto de llegar a triunfar en sidecar

Tercero en la clasificación general esta temporada de F600 sidecar en Francia, Fenoy es pionero en nuestras fronteras y tiene que competir fuera de ellas

Solo Francia, Alemania e Inglaterra tienen en Europa campeonatos de sidecar, además del Mundial

Joaquim Fenoy, en acción en un circuito de Francia

Joaquim Fenoy, en acción en un circuito de Francia /

Jordi Delgado

Jordi Delgado

Esfuerzo, superación, sacrificio… Cualquiera de estos atributos son aplicables a un deportista que trata de triunfar en un deporte catalogado como ‘minoritario’, algo que es siempre un poco más que un reto personal. Está claro que no es fácil, y menos si tienes que viajar constantemente fuera de tu país para poder hacerlo. Joaquim ‘Quim’ Fenoy lo ha conseguido compitiendo en sidecar, un deporte que no tiene presencia en España y solo se practica fuera de nuestras fronteras.

Fenoy es, junto con un par de amigos que no han podido competir hasta el final este año, el único en nuestro país. El pasajero de Hugo Fretay en el equipo FHC Competition ya ha debutado también como piloto, pero su posición habitual es sobre la plataforma.

 “La sensación de velocidad me enganchó. El primer momento fue de una sensación rara. Te están llevando pero tienes la sensación que eres tú quien lo llevas, porque sin ti no funciona. El piloto lleva el manillar, pero el pasajero, además del contrapeso, hace deslizar la parte de atrás el sidecar, y enderezar o cortar. Y el piloto, al final, lo que hace es frenar y acelerar”, nos comenta Fenoy.

Sus inicios como segundo en la categoría ‘Promo’ le permitieron darse a conocer, “y todo ya fue más rodado. Poco a poco fui subiendo”.

Fenoy, de pasajero con Hugo Fretay en el sidecar

Fenoy, de pasajero con Hugo Fretay en el sidecar / @quimfenoy

El éxito de esta temporada en la FSBK llegó en forma de tercer puesto en la clasificación general de la categoría F600 para Fenoy, y se suma a los dos podios ya cosechados la temporada pasada, en la que consiguió la quinta plaza en el ranking final.

Recursos propios

Desplazamientos, gastos de material, comidas, inscripción… Y unas 14 carreras competitivas divididas en siete fines de semana, más entrenamientos, implican un compromiso total, y un trabajo que por “suerte”, Fenoy puede combinar.

Todo esto, sumado a viajar en el que seguramente ha sido una de las temporadas más difícil de la historia del deporte, ha sido todo un reto, pero con una gran satisfacción personal.

“Ha sido muy complicado, sobre todo para cuadrar los calendarios con los festivos del trabajo”, cuenta el piloto, que ha visto como la pandemia le dejaba en desventaja sobre los locales en cuanto a las posibilidades de entrenamiento.

El Mundial, en el horizonte

Hace unos años, en España, cuna de los deportes de motor, se podían ver carreras de sidecar. Las diferentes pruebas de MotoGP dejaban a los pilotos de esta disciplina mostrarse ante un gran público, pero eso se fue apagando. El circuito de MotorLand, en cambio, mantiene los “bautizos” a este deporte una vez al año, en otoño, en los que todo el mundo puede ir a probar las máquinas.

Hasta que vuelva a llegar, para poder competir hay que cruzar los Pirineos. Francia, Inglaterra y Alemania tienen sus competiciones, y un escalón más arriba está el Mundial, poco alcanzable para aquellos deportistas amateurs sin muchos recursos para invertir o patrocinadores importantes. A pesar de eso, Fenoy y su equipo no descartan estar “en una o dos carreras la temporada que viene”.

Este 2020 ha sido su cuarta temporada, por lo que la progresión es evidente. Fenoy es el pionero para volver a atraer a más aliados a este deporte, y quiere consolidar su actual equipo para mejorar los resultados el próximo año.