Sainz, la lotería de Mónaco... y la de Williams

Carlos Sainz aterriza en Mónaco después de dos fines de semana, en Miami e Imola, que prometían mucho para el piloto de Williams, pero que, por diversas circunstancias no terminaron como esperaba. En todo caso, el 'top cinco' logrado por su compañero Alex Albon en ambas citas demuestra que el FW47 tiene potencial para consolidarse como el quinto equipo e incluso amenazar al cuarto, Ferrari.

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Motivos más que suficientes para que Sainz pueda soñar con un gran resultado en Mónaco, donde priman más que nada las manos del piloto. Eso sí, el madrileño advierte que la obligación de hacer dos paradas que ha introducido este año la FIA en el reglamento para la carrera del Principado, supone una nueva vuelta de tuerca que complica más si cabe cualquier estrategia... y precisamente eso es lo que tratan de afinar en Williams, después de perjudicar al español en sus últimas deciones de carrera.

 “Las dos paradas añaden un elemento de lotería a Mónaco, que ya lo era antes, pero menos. Al que salga desde la pole le va a costar más defender la primera posición que cuando podía controlar la única parada. Para los que salgan delante, sin duda va a ser una carrera más difícil. Y para todos los que salgan más atrás habrá más oportunidades”, valoraba Sainz en su comparecencia ante la prensa en Mónaco.

Llegados a este punto, uno de los periodistas españoles presentes en el Principado, Marco Canseco le preguntó por otro tipo de loterías, en referencia a los 'experimentos' que ha probado Williams a la hora de plantear algunas carreras de Carlos y no tanto con Albon: "Yo soy partidario siempre de empujar a los equipos, aunque a veces es tentador jugar a la lotería con uno de los dos coches. La actitud tiene que ser siempre hacer la estrategia correcta para los dos coches y esa tiene que ser la manera de trabajar... Y es en lo que estamos trabajando para que no vuelva a suceder", ha contestado Sainz. "Lo de Imola o Miami son errores grandes, pero son errores que a nivel de comunicación tenemos que mejorar y nos están costando muchos puntos esta temporada", ha añadido.

"Mientras estos errores se hagan este año, donde no hay coche para ganar y no se hagan cuando haya coche para ganar, creo que este año lo valdrá la pena como aprendizaje ... lo importante es tener velocidad y en la séptima carrera con el equipo, está ahí", ha dicho Carlos, que prefiere ver el vaso medio lleno.

En Mónaco Sainz asegura que intentará aprovechar su oportunidad: “En los últimos dos grandes premios la clasificación ha sido mi punto fuerte y también el del coche. Vamos a ver cómo responde el Williams en un circuito tan diferente", advierte, con moderado optimismo.

Sobre el pulso con Ferrari, que hace un año vivió aquí un gran triunfo de Leclerc, el único piloto monegasco de la parrilla, Sainz considera que "depende más de ellos. Nosotros nos quedamos siempre de tres a cinco décimas de la pole y Ferrari a veces está a una décima y en otras, como en Imola, donde cayeron los dos coches en Q2, tienen problemas en clasificación. Somos más consistentes que otros equipos sufren con estos neumáticos tan complejos en clasificación, pero por ritmo Ferrari sigue por delante de nosotros”, ha analizado.

Por último, Carlos también ha hecho su propia crítica de la película de la F1 que protagoniza Brad Pitt y que los pilotos ya han visto en premiere en Mónaco antes de su estreno mundial el 27 de junio: "Se nota que es un poco al estilo de Hollywood. Atraerá a mucho público nuevo. Y le irá muy bien a la gente que no sabe nada de F1. Para los aficionados más acérrimos y para los periodistas y nosotros, hay cosas que quizá parecen demasiado americanas o demasiado hollywoodienses. Pero, sinceramente, me lo pasé muy bien. El equipo ha hecho un trabajo excepcional, creo que una muy buena película de Hollywood".