El ridículo del presidente de la FIA al dar el premio a Red Bull

La velada organizada por la FIA en Bolonia para entregar los premios a los campeones de todas las categorías automovilísticas tuvo un momento realmente embarazoso, cuando el presidente de la federación Mohamed Ben Sulayem protagonizó una salida de tono tras el discurso del director de Red Bull Christian Horner recogió el trofeo por el título de constructores de F1 en 2022.

El británico quiso cerrar alocución con un gesto hacia el fundador de Red Bull, Dietrich Mateschitz, fallecido en octubre pasado, en pleno GP de Estados Unidos. "Por suerte pudo ver a Max (Verstappen) ser bicampeón del mundoi, aunque hubo algo de confusión con los puntos en el Gran Premio de Japon", dijo Horner.

Sulayem soltó una respuesta que pilló totalmente desprevenido al jefe de Red Bull: "Esto (el trofeo) es algo que no tiene nada que ver con el tope presupuestario", empezó en todo jocoso. La cara de Horner era un poema, mientras el presidente de la F1, Stefano Domenicali, asistía a la escena intentando disimular su asombro.

Lejos de zanjar el tema, Sulayem entró entonces en el asunto del reparto de puntos en Japón. Verstappen fue matemáticamente campeón al contabilizarse todos los puntos de la victoria, pese a que por la lluvia se completaron pocas vueltas y la carrera se vio interrumpida, lo que llevó a muchos, incluído el propio Max, a pensar que iban a conceder solo la mitad de puntos en aquella carrera.

"Lo de Japón fue polémico. Se culpó a la FIA por los puntos, pero la FIA no hizo esa norma. Fuisteis los equipos quienes la hicisteis y nosotros sólo la implementamos", defendió Sulayem en un tono airado. Domenicali , con una sonrisa forzada, decidió intervenir y pidió a Sulayem que se concentrase en lo importante, "en los premios".

Sulayem acabó diciendo que tanto Verstappen como Red Bull son merecedores de sendos títulos y se estrechó la mano con Horner. "Todos los que ganan lo merecen. Así son las reglas. Por tanto, buen trabajo. Lo digo honestamente".