Mercedes aún esconde potencial

Tras las dos semanas de test en Barcelona en febrero, pocos, por no decir nadie, se esperaba que Mercedes liderara el Mundial con tanta diferencia con Ferrari. Tanto en el Mundial de constructores como en el de pilotos. Una diferencia engañosa en cuanto a distancia de rendimiento entre los monoplazas pero que por circunstancias de incidentes, problemas en el motor de los de Maranello y una gestión impecable de las carreras por parte de los de Brackely, hace que ahora mismo las críticas contra los coches de rojo vayan en aumento.

Lo preocupante es que desde la misma prensa italiana apuntan que Mercedes ganó con el freno de mano puesto. La escudería alemana no contaba con ser tan superiores y reservaron combustible por si la batlla con Ferrari acababa llegando en algún momento de la carrera en China. Con el modo ahorro lograron más de diez segundos de ventaja sobre Vettel, tercero, y ni siquiera sufrieron para lograr el doblete en Shangai.

La Scuderia no está nada satisfecha con los resultados que ha obtenido hasta ahora y trabaja en reducir la abismal ventaja que se vio sobre el trazado asiático. En Italia también explican que el motor Ferrari tampoco funcionó en plenitud ya que por motivos de fiabilidad redujeron 12 caballos su potencia en el monoplaza, según las  las lecturas fonométricas. Esto contradice a Mattia Binotto, jefe de Ferrari, que avisó en la previa de carrera que no iban a hacerlo.

Vettel ataca la prensa

Los tiempos andan revueltos en el equipo italiano y Vettel es la figura que lo expresa. Cargó contra la prensa italiana precisamente por “mal periodismo”, según lo calificó el piloto de Heppenheim: “Realmente, es solo un periodismo pobre, desde mi punto de vista. Pero no soy periodista para juzgar. Así que no deberías tomar mi juicio como algo personal”, dijo el alemán.

Mercedes gana terreno y otro año en blanco en la Scuderia podría tener graves consecuencias. Este año sí tienen coche para ganar.