La hora de la verdad para Alpine y Alonso

"Este es el comienzo, chicos y chicas sexys. Lo mejor está por llegar el próximo año. Os lo prometo. Esto fue un calentamiento, como los boxeadores. Esto ha sido el 2021 para nosotros". Con este mensaje, contundente y lleno de esperanza, despedía Fernando Alonso el Mundial en Abu Dhabi. Las palabras que el asturiano dedicó a sus ingenieros y mecánicos por la radio, tras cruzar la bandera a cuadros en Yas Marina, forman parte de su ya célebre 'El Plan'. Una especie de conjura en la que Alonso y Alpine se han enfrascado con el objetivo de volver a pelear por victorias y podios cuando entre en vigor el nuevo reglamento de la Fórmula 1, a partir de 2022. Y está claro que como instrumento de marketing, 'El Plan' ha funcionado de maravilla. Pero en el terreno deportivo hay que dar con la 'tecla mágica'. Las sedes de Renault en Viry-Châtillon y Enstone se han volcado en el monoplaza que hará su debut en Barcelona el 23 de febrero. "Espero que cuando pongamos el coche en pista tengamos una buena sorpresa", dice Fernando. Será la hora de la verdad.

Marcin Budkowski, director técnico de Alpine, pone especial énfásis en lo que han conseguido esta temporada Alonso y Esteban Ocon con un coche muy poco evolucionado desde 2019: "Hemos usado prácticamente el mismo motor, chasis y caja de cambios por tercer año consecutivo. Fue el resultado del Covid. Y aún así hemos conseguido el máximo objetivo al que podíamos aspirar este año, quintos por equipos, la victoria de Ocon en Hungría, el podio de Fernando en Catar y un final en progresión. Eso demuestra que las áreas del equipo que no estaban congeladas han avanzado. Es una buena señal".

De menos a más

Alonso, tras dos años alejado del 'gran circo', ha terminado décimo en el campeonato, con 81 puntos, por delante de Ocon (11º con 74). Un rendimiento muy parejo de los dos pilotos, que se ha traducido en 13 puntos de ventaja final de Alpine sobre Alpha Tauri. "¿Una calificación? La temporada ha sido ciertamente positiva. Yo díria que un 7 o un 8. Es un notable. La victoria de Hungría sigue siendo el buque insignia de la temporada. Y también logramos que Alonso volviera al podio, lo que está muy bien. Pero espero que este sea un punto de partida para el futuro", valora el director de competición Davide Brivio en la revista 'Autosprint'. El italiano, que dejó atrás tres décadas de éxitos como team manager en MotoGP para embarcarse en la aventura de la F1, destaca otra de las claves de este curso en Alpine: "Esteban y Fernando tienen una gran relación y siempre han estado dispuestos a ayudarse mutuamente durante todo el año, me sorprendió mucho su actitud. Creo que representa un modelo, un ejemplo de cómo dos compañeros de equipo deben trabajar bien juntos".

También Alonso le pone buena nota a la temporada, aunque sin olvidar que el verdadero exámen llegará en 2022: "La temporada en sí ha sido buena. A partir de Bakú considero que he sumado bastantes puntos, hemos encontrado una regularidad que no tuvimos al principio. Con el equipo hemos limado algunas cosas que no estaban a tope. En cuanto a estrategia, paradas en boxes, salidas y la ejecución del fin de semana, somos un equipo casi de referencia, pero nos falta que en las dos fábricas acierten con el nuevo coche", subraya. "Ésta es mi mejor temporada desde 2014, en términos de puntos y posiciones. Así que definitivamente es un buen regreso y una preparación para lo que vendrá".

Laurent Rossi, CEO de Alpine, considera que este año su equipo ha desarrollado "músculo" después del tibio inicio en Bahrein y atribuye el progreso principalmente a las manos de Alonso y Ocon: "Estábamos perdidos al comienzo. La mejora más grande provino de la forma en que trabajamos, especialmente los pilotos, que sacaron el máximo provecho y luego tuvimos que empujar sus límites".

La pregunta ahora es si Alpine podrá continuar este impulso y plantarse en la nueva era de la F1 con un monoplaza que les permita llevar adelante 'El Plan' de Alonso, que de no mediar un desastre absoluto, espera quedarse en el Mundial "al menos dos o tres años más". Rossi es optimista: "Tendremos una buena evolución a nivel de motor, y también del chasis. Hay que esperar a ver a qué nivel estamos en febrero respecto a los demás equipos. Nuestro objetivo, de todos modos, es ganar", concluye el francés.