FÓRMULA 1

El Gran Premio de Japón, en tres claves

Hamilton puede coronarse ya campeón en Austin tras el desastre de Ferrari en Suzuka.

Hamilton , en el podio de Suzuka

Hamilton , en el podio de Suzuka / afp

Josep Viaplana

Josep Viaplana

La inapelable victoria de Lewis Hamilton en Suzuka y el golpe de efecto que supuso la retirada por avería de Sebastian Vettel dejan el Mundial de Fórmula 1 2017 prácticamente visto para sentencia. 

El británico, con 59 puntos de ventaja a falta de cuatro grandes premios (100 puntos), tendrá su primer ‘match ball’ por el título en Austin, el próximo día 22, donde Carlos Sainz debutará con Renault. Antes, resumimos en tres claves lo que dio de sí el GP de Japón.

1. Primer 'match ball' para Hamilton

Lewis Hamilton puede ser campeón la próxima semana en Austin, Estados Unidos, si gana la carrera y Sebastian Vettel, que tuvo que abandonar por un nuevo problema mecánico, es sexto o peor. El británico dispondrá de la primera bola de partido a falta de cuatro grandes premios para que finalice un campeonato que hasta Malasia ha estado tremendamente igualado.

Los 59 puntos que separan ahora a Hamilton de Vettel cuando restan todavía 100 en juego parecen una distancia insalvable para el alemán, tanto por la distancia como por las sensaciones que desprenden unos y otros en las últimas carreras. El británico ha ganado cuatro de los cinco últimos grandes premios -fue segundo en Malasia-, es decir, desde que se acabó el paréntesis estival no hay quien pueda con él ni con su Mercedes, mientras que Sebastian Vettel ha hecho solo dos podios –segundo y tercero en las carreras de Spa y Monza- y ha abandonado en dos carreras -Singapur y Japón-. Los 118 puntos que ha sumado Hamilton contrastan con los 45 de Vettel.

2. La fiabilidad de Ferrari, en entredicho

Después de haber construido este año un coche rápido y fiable, que llevó a Sebastian Vettel a liderar gran parte del campeonato, todo se ha venido abajo en las últimas carreras. Los problemas se suceden tras el paréntesis estival, pero ha sido sobre todo en los tres últimos grandes premios cuando se ha empezado a caer en picado. Vettel tuvo un accidente en la salida de Singapur, salió el último en Malasia por un fallo en el coche que ‘contagió’ al de Raikkonen y no le dejó correr y ayer se quedó, prácticamente, en la parrilla.

¿Qué pasó? Ferrari no tuvo tiempo suficiente tras detectarse un fallo en una bujía en el coche de Vettel antes de la salida y trataron de solucionarlo cambiando el setup del motor. Solo se dieron cuenta del problema cuando el pitlane se abrió antes de la salida. Una vez en la parrilla, los mecánicos trataron de solucionar el problema, retirando la tapa del motor, pero no hubo tiempo suficiente para que la Scuderia retirase las partes necesarias para cambiar físicamente la bujía dañada y por eso se decidió cambiar el maping. No funcionó.

3. Carlos Sainz, con efectos inmediatos

Si en Singapur se anunció que Carlos Sainz correría con Renault en 2018, en Japón la noticia fue que lo hará con efectos inmediatos, es decir, que en el próximo GP de Estados Unidos, el 22 de octubre, ya le veremos de amarillo y negro como compañero de equipo de Nico Hulkenberg. El equipo francés, que ya le quiso fichar el año pasado, le considera una pieza clave en el desarrollo de su programa de futuro y entiende que con estas cuatro carreras de experiencia podrá empezar el 2017 mucho más preparado.

Carlos Sainz viajará, según algunas informaciones, de Suzuka a Enstone, donde está ubicada la sede del equipo que en 2005 y 2006 vio ganar los dos títulos de Fernando Alonso. Días de jornada intensiva para tenerlo todo con el máximo orden posible en esta recta final de la temporada. La cuestión es que Red Bull se ha asegurado una opción, unilateral, por la que si el año próximo tiene un hueco en el equipo -nunca en Toro Rosso- le puede repescar y al respecto las conversaciones de Verstappen con Mercedes parecen ir en serio.