Ferrari, un polvorín

El fiasco en Bakú, con los abandonos de Charles Leclerc y Carlos Sainz, ha encedido todas las alarmas en la ‘Scuderia’ que pierde fiabilidad

Mattia Binotto anunció que los problemas estructurales no estarán solucionados antes del GP de Canadá

Leclerc, parado en Bakú

Leclerc, parado en Bakú / EFE

Cristina Moreno

Se las prometían muy felices en Ferrari a principio de temporada, cuando firmaban un doblete en Bahrein, la primera prueba del Mundial. Pero lo cierto es que las cosas han ido empeorando para la ‘Scuderia’, que si bien entraba como líder del campeonato de constructores al GP de España, tras la cita de Bakú se encuentra ya a 80 puntos de un Red Bull que ha demostrado ser el equipo más fiable de la parrilla.

El abandono este domingo en el GP de Azerbaiyán de Carlos Sainz en los primeros compases de carrera y, de Charles Leclerc cuando lideraba, ha vuelto a encender todas las luces de alarma. El madrileño explicó que fue un problema hidráulico el que le dejó fuera de la pelea en la curva nueve. Era su tercer cero de la temporada.

Por su parte, el monegasco que había recuperado el liderato perdido en la salida, tuvo que volver a boxes en la vuelta 20 por un fallo en la unidad de potencia y un humo blanco saliendo de su coche. “Estábamos a la cabeza de la carrera, estaba manejando bien los neumáticos, solo teníamos que manejar los neumáticos y la carrera hasta el final, lo cual creo que fue… definitivamente estábamos en la mejor posición posible para hacerlo. Otro DNF: duele...”, explicaba Leclerc tras la carrera, asumiendo que tendrán que investigar cuál ha sido el problema para evitar que vuelva a suceder.

Y es que es la segunda vez entres carreras que el piloto del Principado tiene problemas con su monoplaza. Ya le sucedió en el GP de España cuando unos problemas en la unidad de potencia de su F1-75 le obligaron a abandonar mientras estaba al frente. Un duro varapalo que remató en la siguiente cita con un sexto puesto en el GP de Mónaco, el de casa.

Tanto en Barcelona, como en Mónaco como en Bakú, Leclerc partía desde la pole pero se quedó sin poder culminar. No se le da bien al de Ferrari salir desde la primera plaza. Lo ha conseguido hasta en seis ocasiones en estas ocho carreras disputadas y solo en dos, Bahréin y Australia, pudo ganar.

Trabajo en Maranello El doble abandono era algo que no sufría la ‘Scudería’ desde Monza 2020. Es más, desde Australia 2009 no se quedaban los dos coches fuera por un problema mecánico.

En el seno del equipo llaman a la calma y apuesta por seguir trabajando. “Prefiero tener un buen rendimiento y tratar de arreglar la fiabilidad que lo contrario”, explicaba el jefe de Ferrari, Mattia Binotto quien avanzaba que no tendrían tiempo de hacer cambios estructurales antes de la cita en Canadá.

Y mientras la prensa italiana califica de ‘desastre’ la carrera de los ‘Cavallino Rampante’ en Bakú, otros, como el presidente del Comité Olímpico Italiano, Giovanni Malagó, llaman al optimismo.