Las claves del Gran Premio de Brasil

El incidente de Ocon y Verstappen en boxes

El incidente de Ocon y Verstappen en boxes / Twitter

Josep Viaplana

Josep Viaplana

Lewis Hamilton (Mercedes), campeón desde hace dos semanas en México, no afloja el ritmo y este domingo se anotó una nueva victoria en el Gran Premio de Brasil, penúltima prueba del Mundial de Fórmula 1, que se disputó en el circuito de Interlagos de Sao Paulo. El inglés le dio a su escudería su quinto Mundial de constructores consecutivo, con un Vettel 'desaparecido'.

Hamilton logró su victoria 72 en la categoría reina y compartió protagonismo con el holandés Max Verstappen (Red Bull), que finalizó segundo y tras la carrera se encaró a empujones con Esteban Ocon (Force India). 

Estas son las claves del GP de Brasil:

1. Ocon arruinó la carrera de Verstappen

Max Verstappen, que estaba haciendo una espectacular carrera, encaramándose al liderato en la vuelta 40 tras salir quinto, se llevó uno de los disgustos más grandes de su carrera cuando Esteban Ocon, en su ímpetu por desdoblarse, se lo llevó por delante cuando lideraba con cierta comodidad.

Todo parecía decidido… nadie contaba con el error de Ocon, que provocó un auténtico golpe de teatro y arruinó la carrera de Max. El francés, que ni tan siquiera luchaba por los puntos, intentó la maniobra en la segunda vuelta tras salir de boxes porque al montar un neumático fresco y superblando (rojo) era el piloto más rápido en la pista en ese momento. El problema es que, sin jugarse nada, se metió en un lío mayúsculo. Verstappen no protegió la posición y trazó como si nadie viniera detrás suyo, con suavidad, porque no podía ni pensar que un doblado quisiera adelantarle. Fue penalizado con una sanción de 10 segundos de stop&go. Pero el mal ya estaba hecho. Eso ya no lo arreglaba nadie. Perdió 9 segundos con el trompo y el Red Bull quedó tocado y se esfumó el triunfo.

2. Max arrinconó al francés tras la carrera

Son imágenes que no se acostumbran a ver en los grandes premios, donde siempre se ve a los pilotos de guante blanco, pero el enfado de Verstappen con Ocon era tan grande que al bajarse del coche le esperó y fue a por él cuando aguardaba el control de pesaje de la FIA. Max, que por radio le llamó “idiota” en repetidas ocasiones, increpó al de Force India y le empujó, enrabietado, en varias ocasiones sobre el pecho antes de marcharse hacia el podio y con la presencia de Brendon Hartley, Valtteri Bottas y, lógicamente, los comisarios de la FIA. No le dio un puñetazo de milagro. El cabreo del holandés era monumental y tenía razón para estar enfadado, pero no para perder los papeles y más él, que en el pasado ha protagonizado muchos lances'en la pista de estas características con sus oponentes.

3. La extraña ‘desaparición’ de Vettel

Ferrari y Vettel tenían esperanzas en Interlagos para recuperar la senda de la victoria, pero un cúmulo de errores provocó que lucieran nuevamente las debilidades del  alemán, del coche y la estrategia del equipo. Vettel no gana desde el GP de Bélgica, a finales de agosto, y en las últimas siete carreras solo ha subido tres veces al podio, dos veces como tercero. Los número de Raikkonen son mejores. Ha sumado cuatro podios, entre ellos un triunfo en Austin y en Interlagos fue tercero. Sebastian se ha deshinchado desde el paréntesis estival, al ritmo que el coche perdía potencial y acumulaban errores.

En Brasil tuvimos un compendio de todo ello. Se la jugaron el sábado, optando una estrategia diferente a Mercedes y Red Bull. Salir con neumáticos más duros provocó que ambos coches perdieran posición en la salida y, desde ahí, la carrera de Seb fue a trompicones. Cometió errores de pilotaje que llevaron a Kimi a adelantarle, hizo un pitstop lento, no tenía ritmo y el equipo adoptó la insólita decisión que dejara pasar a Raikkonen. Un fin de semana para olvidar dentro de una segunda parte de temporada horrible, que contrasta con el gran rendimiento que tuvieron todos al inicio de año. Misterioso.