El análisis del GP de Emilia Romagna de F1

Verstappen ganó la carrera en la primera curva

El GP de Imola resultó una carrera apasionante, repleta de sorpresas y con una batalla al límite entre Verstappen y Hamilton, de la que el holandés salió vencedor. Después de Bahrein y ahora Italia, parece una evidencia que este campeonato está muy igualado y que serán los pequeños detalles los que puedan decantar la batalla por uno u otro lado. 

Hamilton sumó la pole, pero Verstappen, con la ayuda de Checo Pérez, le robó la cartera en la salida, cogiendo ventaja, tocándose, sin miedos, y le llevó a un escenario de presión tan enorme que provocó que el inglés cometiera el primer error en pista en tres años. A partir de ahí, un circuito que no admite errores, a la antigua usanza, y con el acompañamiento de la lluvia, nos depararon un gran espectáculo. El entretenimiento parece garantizado. Este Mundial promete emociones fuertes…

Bottas, en la picota con un año por delante

Mercedes y Hamilton ganaron la primera carrera en Sakhir, pero el bajo rendimiento de Valtteri Bottas ha vuelto a poner al finlandés a los pies de los caballos. Él mismo se ha encargado de filtrar a sus más allegados que podría retirarse a final de temporada, buscar aire fresco fuera de la Fórmula Uno y se le adivina un curso difícil, complicado y en el que va a ser el blanco de las iras.

El primer problema de Bottas es que sin un coche tan superior a la competencia como el que tenían las miradas se volverán hacia él, repetidamente, y en el paddock de Imola ya se hablaba del futuro de George Russell, que está en Mercedes… y el resto irá en función de lo que decidida Hamilton. Si el inglés hace un parón, Verstappen es el oscuro objeto de deseo. Otro piloto que está apretando fuerte para hacerse un hueco en el equipo alemán es Lando Norris. No hay que perderle de vista. En Imola hizo una gran carrera.

Miami, sin público en BCN y ¿23 carreras?

Ya comenté después del GP de Bahrein que la Fórmula 1 busca recobrar la normalidad en 2021 después de una temporada en la que la pandemia del coronavirus hizo temblar sus cimientos. Se ha programado el calendario más largo de la historia, con 23 grandes premios por delante, pero durante el fin de semana ya vivimos los primeros cambios. Y, según nos cuentan, no va a ser los últimos.

La Fórmula 1 anhela poder celebrar sus carreras con público, aunque conscientes de que se limitarán los aforos en función de la evolución del Covid-19 en cada país y el primer golpe ha sido el anuncio del Procicat de prohibir que haya 15.000 aficionados en las gradas durante el GP de España. La decisión ha venido a continuación de la baja de Canadá, a la que podrían seguir otras, pero también la alegría de que Miami recuperará su gran premio, en teoría, por diez años.