El análisis: Carlos Sainz acaricia su primera victoria

Sexta victoria en nueve carreras de Max Verstappen, que está dominando con mano de hierro el campeonato en su afán por revalidar el título. Carlos Sainz, que ha sumado el quinto podio del año, ha peleado hasta cruzar bajo la bandera a cuadros por un triunfo que se le resiste pero que en Montreal ha acariciado. Lewis Hamilton les ha acompañado en el podio en una carrera en la que Fernando Alonso ha terminado noveno por sanción.

El MEJOR VERSTAPPEN NO FALLA BAJO PRESIÓN

El holandés, que sumó dos abandonos en las tres primeras carreras por problemas de fiabilidad en su coche, se ha resarcido con creces y está protagonizando una temporada espectacular, consiguiendo seis victorias en nueve carreras. Tiene ya a 46 puntos al segundo y 49 al tercero, Pérez y Leclerc respectivamente, con lo que encara un mes de julio clave con enorme confianza y seguridad. Verstappen, que se ha hecho mejor piloto al quitarse la presión tras ganar el título en 2021, ha perdido el toque de locura que le caracterizaba y se ha convertido en un piloto eficaz, equilibrado y que no comete errores sin perder a su vez la agresividad, el carácter y la determinación. En Montreal, pese a la enorme presión a la que le sometió Sainz, no cometió el más mínimo fallo y ganó con todo merecimiento una carrera que se le complicó con un temprano pitstop y con la salida del coche de seguridad a 20 vueltas del final.

SAINZ ACARICIA SU PRIMERA VICTORIA

Después del abandono de Bakú necesitaba una carrera (más que un resultado) que le devolviera la confianza en un año que no está siendo fácil. Carlos Sainz ha brillado con luz propia en Canadá, donde ha realizado una de sus mejores y más completas carreras y estuvo muy cerca de su primera victoria. Acarició el triunfo, que buscó con ahínco, pero enfrente se encontró con un Max sublime que no mostró ninguna debilidad. Su quinto podio del año llegó después de mostrar una conducción brillante, sometiendo al holandés a una enorme presión desde la salida y muy especialmente tras la salida del safety car en la recta final del envite. Evidenció un ritmo vertiginoso, haciéndose acreedor de la vuelta rápida y estuvo muy atento e inteligente en todas las maniobras. La carrera de Montreal tiene que ser una inyección de confianza y moral para el futuro… inmediato.

LA FIA, EL EFECTO REBOTE Y LAS VACILACIONES

La FIA ha decidido cambiar las reglas del juego sin que hayamos cruzado el ecuador del campeonato. Superadas las ocho primeras carreras, el efecto rebote, conocido como el ‘porpoising’, que se ha mostrado tras los cambios aerodinámicos de esta temporada, va a provocar modificaciones en el reglamento. El show de Hamilton al acabar la carrera de Bakú –no pongo en cuestión que tenía fuertes dolores de espalda- ha dado sus frutos y la FIA pide a los equipos que realicen un examen más detallado del suelo del monoplaza y, por otro lado, va a utilizar una métrica, basada en la aceleración vertical del coche, que otorgará un límite cuantitativo para el nivel aceptable de oscilaciones. Curioso, cuanto menos, que ello venga por la protesta de un equipo que ha ganado ocho de los nueve últimos títulos y que ahora no está en condiciones de ganar. Pueden tener razón, no lo niego, pero que algo huele mal es una evidencia. La indignación en Red Bull y Ferrari es lógica.