Alonso, apasionado e incombustible

Fernando, como ya nos tiene acostumbrados, ha protagonizado otro movimiento espectacular que, a sus 41 años recién cumplidos, le garantiza su presencia en la Fórmula Uno un mínimo de otras dos temporadas. Cuando se daba por hecho que seguiría en Alpine, que al principio mostró muchas reticencias a la renovación por el elevado sueldo del asturiano, ha firmado por Aston Martin y será el compañero de Lance Stroll en 2023.

Regresó a la F1 en 2021 empujado por ‘The Plan’ de Alpine, el objetivo del constructor francés para llegar a competir por el título. Las cosas no han funcionado como se esperaba y, pese a que el equipo ha mejorado notablemente, se encuentra instalado en el segundo pelotón detrás de los tres grandes. Fernando ahora decide emprender un nuevo ‘The Plan’, dentro de una escudería que señala que va a contar con los medios suficientes para dar un nuevo paso al frente y es evidente que los conocimientos del bicampeón español les van a ser de gran ayuda.

Es incombustible, trabajador y ambicioso y, pese a la edad, mantiene la ilusión de sus inicios. Esta es la clave del éxito y el por qué todos le quieren en sus filas. En Budapest, el domingo, acabó por octava carrera consecutiva en los puntos y su apetito permanece intacto, al igual que su carácter ganador. 

Alonso corrió en Hungría su 349 gran premio, siendo el segundo piloto de todos los tiempos que más carreras ha disputado por detrás de Raikkonen, que hizo 350 y al que igualará a finales de agosto en Bélgica. Con dos títulos, 32 victorias, 22 poles y 98 podios, volvió en 2021 para quitarse una espina clavada. Es la asignatura pendiente y ahora ve la posibilidad no solo de quitársela sino de agrandar su estela convirtiéndose en el piloto que más grandes premios y temporadas habrá disputado en F1.

El envite no va a ser fácil, pero Fernando nunca lo ha tenido fácil. Ha sido un gladiador del volante, su gran pasión, y desde que empezó en los karts de muy pequeño ha vivido por y para la competición.