Los ángeles de la guarda

Lucas Cruz y Alex Haro, copilotos de Carlos Sainz y Nani Roma

Lucas Cruz y Alex Haro, copilotos de Carlos Sainz y Nani Roma

Josep Viaplana

Josep Viaplana

El Dakar 2019 se va a celebrar de forma íntegra en Perú, con un recorrido en bucle que comenzará y acabará en Lima. En total serán 5.000 kilómetros, 3.000 de ellos cronometrados, repartidos en 10 etapas y con el 70% será sobre arena.

Los pilotos y copilotos disponen de muy poca información sobre el recorrido antes de su inicio. De hecho, prepararse para el Dakar es una labor casi imposible por la escasa información entregada previamente a los participantes. La única herramienta para inspeccionar el terreno antes de llegar son los mapas.

La labor del copiloto es en ocasiones poco agradecida, pues los titulares -sobre todo en los éxitos deportivos- se los suele llevar el piloto. En este sentido, el copiloto es como el portero de un equipo de fútbol: “No ganamos los partidos, pero podemos perderlos. Siempre estamos un poco en la sombra. Y al final un buen piloto con un mal copiloto no es capaz de ganar, y al revés pasa lo mismo. Por muy buen copiloto que sea, si no tengo un buen piloto no vamos a ir a ningún lado. Es una labor de equipo”, apuntaba Diego Vallejo.

Un hombre tranquilo

Lucas Cruz habla pausadamente, rebosando tranquilidad, seguro de si mismo. Observa y ejecuta. Es la mano derecha de Sainz, con el que ya ha ganado dos Dakar y cuya relación desprende una gran química. El copiloto catalán, ingeniero de formación, lleva más de dos décadas recorriendo caminos de tierra, asfalto y arena.

“Cuando hablas el mismo idioma dentro del coche y tienes una relación de amistad, todo se hace más fácil. Es fundamental cuando pasas tantas horas dentro del coche. Yo me preocupo de la mitad hacia la derecha, porque en la mitad a la izquierda tengo plena confianza en Carlos. No tengo problemas ni preocupaciones”, explicaba Lucas Cruz.

Àlex Haro, por su parte, experto en navegación, se considera un privilegiado por acompañar a un hombre que ha vencido en coches y motos esta histórica carrera, puesto que “interpreta y sabe muy bien lo que yo tengo que hacer con el road book e interpreta las cosas difíciles”. Corrabora las palabras de Carlos Sainz, quien apuntó que “un copiloto te puede hacer ganar o perder un Dakar. Es mucho más importante que en el Mundial de Rallies”.