Farrés y las dos caras del Dakar

Gerard Farrés y Dani Oliveras están protagonizando un debut de auténtica locura en Side by Side, la categoría de moda en el Dakar por los reducidos costes de estos vehículos ligeros y su efectividad en las dunas del desierto peruano. Tras una década de experiencia en motos, donde firmó un brillante podio en 2017, Farrés y su copiloto, también motero Oliveras, han encontrado en los buggies SxS una fórmula perfecta para ser competitivos, pero en las siete etapas que llevan disputadas han vivido una montaña rusa de emociones y altibajos.

Arena y burocracia

Enrolados en el equipo oficial Monster CAN-AM y después de casi un año de adaptación a las cuatro ruedas, el tandem catalán llegó a la salida del Dakar 2019 en Lima con las máximas garantías. Brillaron de entrada y parecían destinados a hacer historia como primeros ganadores españoles en su clase, pero en los últimos dos días han pasado de ser líderes a despedirse de sus opciones.

La aventura no está siendo fácil. Farrés sufre en el coche y también en los despachos. Tras la disputa de la quinta etapa, en la que los comisarios  modificaron la clasificación  después de la neutralización del tramo final, el piloto de Manresa se vio muy perjudicado por la burocracia. Le dejaron sin liderato, tercero a más de 7 minutos. Ya en la carretera, el domingo recupero el primer puestode la genaral, pero este lunes, en una jornada desastrosa, ha perdió 1 h:56’ en meta y ha dicho adiós a sus ilusiones de triunfo final en Lima.

Ahora, a falta de  tres etapas para que el rally concluya en la capital peruana, el chileno Francisco ‘Chaleco’ López, un viejo conocido de las motos, ha ganado la sçeptima etapa y ha ascendido al segundo puesto de la general de SxS, a 4 minutos del vigente campeón y nuevo líder provisional, el brasileño Reinaldo Varela. Farrés , que marcha cuarto a 1h.02, tiene complicado incluso el podio.