Consejos para mantener una distancia de seguridad correcta

Entre los accidentes de tráfico más frecuentes están las colisiones por alcance, un tipo de percance que ocurre por distintos motivos y que está al alza, generalmente por culpa del aumento del uso de teléfonos móviles o los sistemas de infoentretenimiento de los coches. En una colisión por alcance, y aunque existan circunstancias en las que no es así, el coche o moto que viene detrás y choca con el de delante es el que tiene la culpa, incluso en caso de freno inesperado del coche que va primero, pues se puede alegar que el de detrás no respeta la distancia de seguridad.

El Reglamento General de Circulación obliga a todos los conductores que circulen detrás de otro vehículo a mantener una distancia de seguridad entre ambos que le permita detener el coche con seguridad y sin colisionar con él. La normativa no especifica los metros que hay que dejar de espacio libre para turismos o motocicletas, pero sí dice que el conductor deberá tener en cuenta la velocidad y las condiciones de adherencia y frenado. La norma también obliga a mantener dicha distancia entre vehículos con el objetivo de que otro conductor pueda adelantarlo con seguridad.

De esta manera, mantener una correcta distancia de seguridad no es solo cosa de circular unos metros detrás de un coche, pues las condiciones de la carretera o del tiempo, que afectan al comportamiento del coche, pueden exigir una distancia mayor para permitir al conductor disponer a la distancia perfecta para reaccionar y evitar un accidente.

Sixt, la empresa de alquiler de coches, da los siguientes consejos para saber la distancia de seguridad perfecta en cada momento.

PUNTOS A TENER EN CUENTA

Al volante de un vehículo la concentración debe de ser máxima, entre otras cosas, para no reducir esta distancia de seguridad debido a una distracción o falta de atención. Todo conductor debe adecuar esta distancia según diversos factores:

La velocidad: a mayor velocidad, mayor distancia de frenado se necesita para detener el vehículo.

El estado de la vía: hay que observar si está húmeda, con hielo, con firme en mal estado, con arena, si está lloviendo o nevando…

El estado del vehículo: si los amortiguadores, frenos o neumáticos no están en buen estado, la distancia recorrida para frenar un coche será mayor. También influye si el coche está equipado con dispositivos electrónicos de ayuda a la conducción o no (ABS, ESP, control de tracción…). 

El estado del conductor: el tiempo de reacción aumentará si el conductor se ve afectado por factores como la fatiga y el cansancio, el sueño o el consumo irresponsable de alcohol o drogas, caso en el que no debería estar conduciendo.

MÁS CONSEJOS

En el caso de que el asfalto esté mojado, los neumáticos gastados y el vehículo no disponga de ABS, necesitará más del doble de la distancia para frenar, según pruebas realizadas por la Dirección General de Tráfico (DGT).

Como ayuda para que un conductor sepa con certeza si circula dejando una distancia de seguridad correcta, la DGT recomienda aplicar la regla 1101-1102. Teniendo en cuenta una situación de conducción con asfalto seco y con un vehículo en buen estado, se elige un punto de la vía como referencia (un árbol, un poste de luz, una señal…) y se cuenta 1101-1102 (son 4 segundos). Se llevará una distancia correcta si al terminar de contar todavía no se ha alcanzado el punto elegido.

Hay varias técnicas para saber la distancia que hay que dejar. La DGT avala varios métodos, como la Regla 1101-1102 o la Regla del Cuadrado. En caso de lluvia, hay que doblar la distancia.

Otra regla respaldada por la DGT es la Regla del Cuadrado, útil para el cálculo de seguridad en carreteras secas. Para hacerlo, hay que tomar la velocidad a la que se está circulando, por ejemplo, 90 km/h, se quita la última cifra, quedando 9, y se multiplica por sí misma: 9 x 9 = 81. Así pues, a 90 km/h hay que dejar una distancia de seguridad mínima de 81 metros. La misma DGT recomienda multiplicar por dos la distancia de seguridad para carreteras mojadas. Por lo tanto, a una velocidad de 90 km/h, habría que dejar una distancia de seguridad mínima de 162 metros con condiciones meteorológicas adversas.

¿QUÉ PASA EN CASO DE NO RESPETAR LA DISTANCIA?

La Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial considera como infracción grave el no respetar la distancia de seguridad con el vehículo precedente. En caso de no respetarla, la sanción puede ascender a una multa de 200 euros y la pérdida de cuatro puntos del permiso de conducir. 

Además, del problema legal, no respetar la distancia de seguridad puede incurrir en accidentes por alcance, que ponen en reisgo la vida y la salud de los conductores del coche que no ha respetado la norma y la de los automóviles que circulan antes y después.