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Brabham anuncia que el BT62 podrá ser de carretera

Tras la petición de algunos clientes, la marca anuncia un proceso de conversión que costará 167.000 euros más.

El Brabham BT62 podrá ser de carretera.

El Brabham BT62 podrá ser de carretera. / BRABHAM

Àlex Soler

Àlex Soler

Brabham Automotive tendrá su coche de carretera mucho antes de lo que esperaba. La marca ha confirmado un proceso de conversión de su primer vehículo el BT62, originalmente pensado para ser solo para circuito, que le permitirá circular por carretera. Brabham renacía en mayo del año pasado con la intención de volver a la competición, donde fue famosa, sobre todo, en la década de los 60. No obstante, el pasado julio, en el Festival de la Velocidad de GoodwoodDavid Brabham, responsable del renacimiento de la marca, expresó su deseo de crear un vehículo de calle tras el BT62.

Fiinalmente, el BT62 podrá ser para carretera. Así lo ha anunciado la marca en Twitter y en un comunicado en el que apuntan al deseo de algunos de sus clientes de conducir el superdeportivo también fuera de circuito como el detonante de una decisión que alegrará a más de uno de los compradores. Según Brabham, este proceso de conversión se realizará antes incluso de la entrega del vehículo y costará, en Europa, 150.000 libras (167.000 euros) que se sumarán al precio original del BT62, 1,14 millones de euros. Cualquiera de los compradores de cada una de las 70 unidades que se producirán podrán optar a este cambio, incluso los que compren una de las primeras 35 unidades, que pertenecen a una edición limitada que conmemora las 35 victorias de Brabham en la Fórmula 1.

¿Qué cambiará?

Brabham permitirá participar a sus clientes en el proceso de conversión de cada coche, para que el comprador elija qué quiere añadir al BT62, además de los componentes obligados para ser matriculable. Si no quiere participar, el comprador recibirá el vehículo con lo necesario para salir a carretera según los estándares de la DVSA (Driver and Vehicle Standards Agency).

Los principales cambios se encontrarán en la dirección, aumentando el rango de giro para maniobrar en localizaciones estrechas, en el chasis, con un incremento de la altura libre con un sistema de elevación de los ejes, en la seguridad, añadiendo cerrojo a las puertas, y en el confort, con la inclusión del sistema de aire acondicionado y una tapicería de mejor calidad en el habitáculo. Los cambios se centrarán en hacer que su uso en carretera sea legal pero sin comprometer sus prestaciones y su capacidad en circuito.

El motor que propulsará al BT62 de carretera seguirá siendo un potente V8 de 5.2 litros y aspiración natural de 700 CV y 667 Nm de par máximo. Sin embargo, la conversión para la carretera abierta causará un aumento de peso que, pese a que no ha sido aún declarado, superará los 972 kilos del coche de circuito. Las primeras unidades del BT62 convertido están programadas para este mismo verano.