Alonso y Palou empiezan bien en Indianápolis

Fernando Alonso marcó el quinto mejor crono el primer día de entrenamientos para las 500 Millas de Indianápolis, a una media de 223,238 millas por hora (359,267 km/h). Un inicio muy prometedor con el coche de Arrow McLaren Schmidt Peterson, que nada tiene que ver con el fallido proyecto del asturiano y McLaren en la anterior edición de las 500 Millas. Esta vez, Alonso arrancó a solo una décima de segundo del mejor tiempo de Ryan Hunter-Reay, ganador en 2014, que le precedió en cuarto puesto. James Hinchcliffe, a 224.526 m/hm, fue el más rápido ayer. 

Alonso terminó satisfecho el 'refresher test', obligatorio para los pilotos que no corren en un óvalo desde hace más de un año y valoró su primera experiencia con el aeroscreen, la protección del cockpit que usa la IndyCar. "El aeroscreen está bien. La visibilidad es buena. Hace un poco más de calor dentro del coche, pero no está mal", comentó a la NBC..

"El equipo es nuevo, pero corre cada fin de semana y tiene la experiencia de llevar muchas temporadas en la IndyCar. Por ahora el evento ha comenzado bien y sin problemas. El comportamiento del coche es muy distinto ahora que tiene el aeroscreen. Tienes que adaptarte un poco y estamos ajustando los reglajes, pero la velocidad está ahí y sabes que el coche estará en un lugar muy razonable, si tienes en cuenta la experiencia de todo el equipo", aseguró Alonso, ilusionado con vistas a la carrera del 23 de agosto.

En los test para 'rookies' sorprendió de nuevo el barcelonés<strong> Àlex Palou</strong>, que se situó octavo con su mejor vuelta, de 223,128 millas por hora, y fue de lejos el mejor entre los novatos.