Acosta intenta que los médicos de Silverstone le permitan correr

Viaja a Inglaterra con un clavo en el interior de su fémur izquierdo y sin tener del todo consolidado el callo del hueso

El joven piloto murciano, de 18 años y actual campeón del mundo de Moto3, sueña con poder reaparecer en el mítico trazado

Pedro Acosta en la temporada actual

Pedro Acosta en la temporada actual / @MotoGP

Emilio Pérez de Rozas

Emilio Pérez de Rozas

Todo parece indicar que la gran sorpresa, la gran novedad, en el regreso del Mundial de motociclismo tras el mes largo de vacaciones que provocó la suspensión del Gran Premio de Finlandia, es el intento de reaparecer que pretende protagonizar el joven murciano Pedro Acosta, de 18 años, actual campeón del mundo de Moto3, en la categoría de Moto2, un mes después de haber sido operado por el doctor Ignacio Ginebreda de una complicada fractura del fémur izquierdo, que, en principio, se creía limpia y, luego, resultó algo más complicada, aunque nada que no pudiese solucionar en el quirófano uno de los cirujanos más prestigiosos del Institut Quirón Dexeus.

Acosta, que se fracturó el fémur practicando motocross, justo después de acabar segundo en el Gran Premio de Alemania y antes de viajar a Assen para disputar el Gran Premio de Holanda, fue revisado, el pasado viernes, por el doctor Ginebreda y pese a que la fractura no está totalmente curada, la fijación sí está lo suficientemente estable como para pensar que el ‘tiburón de Mazarrón’ puede intentar, mañana, pasar el control de los médicos del circuito de Silverstone, donde este fin de semana se reanuda el Mundial con el Gran Premio de Gran Bretaña.

Volvemos a estar, evidentemente, en la típica situación donde los médicos recomiendan cierta prudencia y los pilotos quieren arriesgar para seguir compitiendo. Acosta, que al ganar brillantemente en Italia, declaró eufórico que “ya estamos aquí, ya hemos vuelto”, tiene la sensación de que, pese a encontrarse a 71 puntos de los dos líderes, el italiano Celestino Vietti y el español Augusto Fernández, precisamente compañero de Acosta en el ‘team’ del finlandés Aki Ajo KTM Red Bull, aún está a tiempo de complicarles la conquista del título pues quedan nueve carreras y 225 puntos en juego.

El fémur izquierdo de Acosta está soldado, sí, pero todavía no tiene suficiente callo óseo como para considerar que está ya consolidado. Es evidente que el exigente control al que mañana, en el hospital del circuito de Silverstone, será sometido Acosta decidirá si puede o no salir en los primeros entrenamientos del viernes, pero la experiencia dice que estos gladiadores pasan siempre esas pruebas, no solo por la pasión que sienten y ponen por volver a correr sino porque su capacidad de recuperación es enorme y, desde que fue intervenido, el ‘tiburón de Mazarrón’, que ya empezó a poner el pie en el suelo a las 24 horas de salir del quirófano, no ha cesado ni un solo día de ejercitarse en el gimnasio y trabajar con todo tipo de máquinas estimuladoras de los músculos y los huesos.