Joan Mir, segundo match-ball en Australia

Joan Mir, que perdió la pasada semana en Japón la primera posibilidad de ser campeón de Moto3, dispone ahora de un segundo match-ball en Phillip Island. El mallorquín firmó en Motegi su peor actuación del año, tanto en entrenamientos como en carrera, donde en ningún momento se sintió a gusto sobre su moto. La victoria de Romano Fenati, que ahora es el único piloto que podría disputarle el título, ha dejado la diferencia entre ambos a 55 puntos cuando restan por disputarse 75.

A Joan Mir, que ha ganado ya ocho grandes premios esta temporada, le valen este fin de semana en Australia casi las mismas combinaciones que le valían en Japón para ser campeón. Para sentenciar el título a falta de las carreras de Malasia y Valencia, el mallorquín tiene que salir de Australia con 50 puntos de ventaja sobre Fenati, los mismos que faltarían por disputarse, ya que en caso de empate final se decidiría por su mayor número de victorias. Es decir, Fenati tiene que recuperarle seis puntos o más en Phillip Island y entre las múltiples posibilidades que se dan la más sencilla es que si Mir acaba segundo se proclamará matemáticamente campeón, independientemente de quien haya ganado la carrera.

El líder de Moto3 tiene claro que “el objetivo para el fin de semana es el título”, pero recuerda que “en Japón también tendría que haber sido así, pero no lo fue..., el objetivo para el fin de semana puede ser el título, porque puede serlo, pero me tengo que centrar en disfrutar, ya que cuando he disfrutado he acabado ganando o haciendo carreras buenas y esa es la clave. Tengo muchas ganas de que empiece el gran premio porque es un circuito muy especial, ya que aquí es donde debuté”, apuntó.

Sin presión

Huye de la presión e insiste en que “no me quiero meter mucha presión, porque tampoco tengo mucha, ya que al final de todo tengo un buen colchón de puntos y, sobre todo, la presión que tengo es que tengo ganas de disfrutar". Joan Mir daba por hecho que el ‘accidente’ de Motegi está olvidado. “Me he olvidado de lo que pasó y no solo de la carrera sino de todo el fin de semana. No sé exactamente qué es lo que pasó, pero Phillip Island es un circuito que me encanta y en donde hice mi debut y es algo muy especial para mí, me encanta y me gustaría por lo menos volver a tener buenas sensaciones y disfrutar”, señaló.

Sus recuerdos en pista, sin embargo, no son muy agradables. Ha corrido dos veces en Phillip Island y las dos veces ha acabado por los suelos. “Este circuito me gusta mucho, aunque tengo la 'espinita' clavada de que me han tirado por A o por B los dos años, aunque espero que este fin de semana no sea lo mismo. El año pasado tuve la mala suerte de que en la segunda curva me tiraron, pero creo que puedo estar luchando por ganar y ya veremos cómo sale ya que tengo ganas de que empiece este gran premio y dejar atrás el mal sabor de boca de Japón”, insistía. El año pasado Binder se cayó delante suyo y se lo comió y el año de su debut, en 2015, fue McPhee, quien se cayó delante suyo.