La remontada de Marc Márquez

Marc Márquez

Marc Márquez se situó líder tras ganar en Alemania / EFE

Sergi Mejías

Sergi Mejías

El Mundial de MotoGP está subido en una montaña rusa de resultados. Y después del GP de Alemania Marc Márquez va en el coche de cabeza. El piloto de Cervera es el líder de la categoría reina tras su victroia incontestable en Sachsenring. Marc ya había avisado que si les iba mal este pasado gran premio es que estaban muy mal, pero sucedió todo lo contrario. Y ya es líder.

El vigente campeón lidera la clasificación provisional con 129 puntos, cinco más que Maverick Viñales, seis más que Andrea Dovizioso y diez más Valentino Rossi mientras que Dani Pedrosa está a 26 puntos pero tal como está de movido el Mundial no se puede descartar nada; un día uno está arriba y al siguiente gran premio ya no.

Viendo a Márquez liderar la clasificación, nadie diría que empezó la temporada fuera del podio, sumó dos ceros y llegó a quedar descolgado a 37 puntos. Pero Marc nunca lo dio por perdido, siempre decía que estaba difícil pero no imposible. El vigente campeón perseveró. Se volvió a caer en Le Mans y tras Mugello volvió a estar a 37 puntos del líder pero no dio su brazo a torcer.

¿Cómo es posible pasar de estar a 37 puntos del líder y en tres carreras pasar a mandar en la clasificación? Porque Márquez ha seguido un camino inverso a su gran rival en la lucha por revalidar el título, de Maverick Viñales, con el rendimiento de los neumáticos como elemento de controversia.

Mientras Márquez tocaba fondo con una caída en Termas de Río, Viñales ganaba la carrera. En Austin se cambiaron los papeles, Marc ganó en su circuito talismán y Maverick no acabó. Jerez supuso un punto de inflexión. Las Yamaha sufrieron mientras que las dos Honda oficiales comparon las dos primeras plazas lideradas esta vez por Pedrosa. Llegó Francia y la 'montaña rusa' pegó otra sacudida: ganaba 'Mack' y Marc se iba nuevamente al suelo. En Italia irrumpió un nuevo 'jugador', Dovizioso; las Honda sufrieron, ganó el italiano y Viñales acabó segundo con Márquez nuevamente a 37 puntos. Catalunya, mismo ganador pero cambio de papeles entre Viñales y Márquez, nuevo giro de la montaña rusa.

Assen volvió a ser un nuevo punto de inflexión. Viñales sufría la segunda caída en carrera, ganaba Rossi, Dovizioso se ponía líder y Márquez, que acabó tercero, seguía siendo cuarto pero a 11 puntos del liderato. Todo se apretaba de sobremanera.

en Sachsenring Márquez no falló, sumó su octava victoria consecutiva en el 'anillo sajón', que unido a los resultados de sus rivales lo auparon a lo más alto de la clasificación general. 

Las comparaciones son odiosas, sí, pero basta fijarse en cómo estaba la clasificación del Mundial a estas alturas la temporada pasada para percatarnos de cómo está todo. Márquez era líder con 172 puntos de 225 posibles seguido por Jorge Lorenzo a 48 puntos, casi dos carreras. Y el piloto de Cervera acabaría ganando el título esa temporada.

Este año el líder lleva muchos menos puntos sumados dejando patente los altibajos de resultados, no solo de él, si no de sus rivales ya que los cuatro primeros apenas están separados por diez puntos.

desarrollo de la moto

Otro detalle que podrá marcar el devenir del campeonato es la evolución de las motos. Mientras Honda tiene programado un test este verano en Brno y debe mejorar su RC213V, Yamaha llegará a Brno en agosto sin ningún test y también tienen la necesidad de dar un paso hacia adelante porque la M1 ha dejado de ser la moto más equilibrada de la parrilla. De hecho la montura más homogénea parece que sea la M1 de 2016 porque en manos de Johann Zarco y Jonas Folger ya llevan un par de podos, el último sin ir más lejos el pasado domingo de Jonas en Sachsenring, en casa. Y el Movistar Yamaha no podría o debería recurrir al chasis de 2016.