Lautaro, más cerca... y Neymar va para largo

El FC Barcelona se va a volcar en los fichajes de Lautaro Martínez y Neymar Junior pues son sus objetivos prioritarios de cara a la temporada 2020-21 aunque es consciente de las dificultades.

El Barça asume la dificultad que entraña hacerse con Lautaro y Neymar de una tacada, más aún en un momento de crisis provocada por la pandemia del coronavirus COVID-19.

Además de los condicionamientos del mercado, cualquier operación se puede complicar por la necesidad de incluir a  otros futbolistas, por no hablar de la predisposición que tengan a negociar el Inter de Milán y el PSG. De ahí que cada caso se aborde de manera muy distinta.     

PRIMERO, LAUTARO

El primer objetivo de los responsables blaugrana es conseguir la contratación de Lautaro Martínez y su intención es cerrarla cuanto antes sea posible. El joven internacional argentino tiene contrato hasta 2023 y la ventana que se abre este verano no es precisamente barata -una cláusula de 11 millones de euros. Pero es un comienzo, teniendo en cuenta que el club lombardo se ha hecho a la idea de que le será muy complicado retener a su delantero.

El Barcelona ya ha mantenido conversaciones con el Inter, sobre futbolistas de la plantilla blaugrana que podrían entrar en esta operación -Cucurella o Aleñá- y en otras operaciones -Arturo Vidal, Junior Firpo o Nelson Semedo- y al mismo tiempo tiene muy adelantados los contactos con Sergio Zárate, su representante.

Además, el Inter ya busca un recambio y, al margen de Olivier Giroud, en Italia incluyen en la agenda ‘neroazzurra’ a Timo Werner, Luka Jovic, Anthony Martial o Victor Osimhen. 

NEYMAR, PARA EL FINAL

Otra cuestión muy diferente es la de Neymar. El exvicepresidente Emili Rousaud confirmaba en la edición del viernes de ‘L’Équipe’ que “una vuelta de Neymar es posible... El Barcelona desea su regreso”.

El hasta hace unas semanas miembro de la junta de Josep Maria Bartomeu explicó que la clave es si las finanzas del club pueden asumir la operación, pero “el interés es real, aunque complejo”. 

A nadie se le escapa que en esta partida de póker el PSG y el Barça no son clubes amigos, por definir de alguna manera su relación. Por otra parte, Neymar quiere regresar al Camp Nou, pero mantiene abierto el frente judicial con el club catalán.

LA BUENA VOLUNTAD Y MÁS

Rousaud valoró que un acuerdo depende de un pago fraccionado, de la buena voluntad de las partes “y, especialmente, de las exigencias de Neymar”. 

Evidentemente, el exvicepresidente ahora es una voz externa, pero sus palabras están en sintonía con la estrategia que Bartomeu se ha fijado para este asunto. Aunque venga de muy largo, los contactos se encuentran en estado embrionario y se intensificarán paulatinamente.

Como en otros casos, el alto coste de la operación -el PSG arranca en 170 millones- implicará la inclusión de otros jugadores -¿Dembélé, Todibo, Griezmann...?- y mucha mano izquierda. El deseo del dirigente blaugrana es que este fichaje se convierta en la culminación del mercado de verano.