La incógnita de Rafa Nadal en Madrid

Rada Nadal no ha empezado la temporada con buen pie

Rada Nadal no ha empezado la temporada con buen pie / EFE

Roger Payró

No faltamos a la verdad si decimos que hasta ahora la temporada de Rafa Nadal está siendo decepcionante para propios y extraños, aunque por todos es sabido que si hay un tenista que tiene más vidas que un gato, que nunca baja los brazos y que es capaz de levantarse cuando todo está en su contra ese es el balear. Con los números en la mano, este año está siendo el peor desde 2004, pues desde entonces Nadal siempre había llegado a Madrid con al menos un título en su haber.

Estadísticas aparte, lo que más preocupa al manacorí es su estado físico. Lastrado por sus maltrechas rodillas, Rafa abandonó en Indian Wells y se dio de baja de Miami para afrontar con garantías la gira de tierra batida, en la que defendía 4.680 puntos. Sin embargo, Nadal no ha encontrado ese punto idóneo para competir al cien por cien y tras tener más apuros de los previstos en las primeras rondas de Montecarlo y Barcelona, el español acabó cayendo antes de tiempo en ambos torneos donde está acostumbrado a contar las ediciones por victorias.

A despegar en Madrid

En ese contexto, el Mutua Madrid Open estaba marcado en rojo en el calendario para ser un punto de inflexión. El Masters 1.000 madrileño es el único de la gira de arcilla que el balear no ganó en 2018 y solo defiende 180 puntos. Pero su participación está en el aire. Nadal ha pospuesto hasta en dos ocasiones su comparecencia ante los medios, así como su entreno del domingo, y finalmente será mañana cuando realice la rueda de prensa.

El motivo no es otro que un virus estomacal. El balear pudo entrenar este lunes durante una hora con su entrenador, Carlos Moyá, aunque mostró claros síntomas de dolor e incomodidad. Este martes volverá a vestirse de corto y será la prueba del algodón para saber si está o no en condiciones para debutar el miércoles contra el canadiense Félix Auger-Aliassime.