Payet desvela por qué se fue al Marsella... y 'despelleja' al West Ham

Payet criticó con dureza al West Ham

Payet criticó con dureza al West Ham / AFP

Dimitri Payet confesó los motivos que le llevaron a abandonar el West Ham de forma precipitada en el pasado mercado de invierno. El delantero francés reconoció que su 'espantada' no fue por causas familiares, como se adujo en su día. Fue algo mucho más banal y sorprendente: simplemente, se aburría.

Payet, traspasado en enero al Olympique de Marsella por unos 30 millones de euros, explicó que "el sistema defensivo del West Ham no me daba ningún placer. Con un 5-4-1, podría haber tenido toda la libertad del mundo, así que para mí es difícil de explicar. Podría decirse que estaba enfadado, sí. Trabajé duro en cada partido sin llevarme ninguna alegría", dijo a 'L'Equipe'.

"Se podría decir que estaba aburrido. Había contactado con el Marsella y con su entrenador, Rudi García, cuya filosofía conocía muy bien. La decisión fue rápida. Si esperaba seis meses para irme, hubiera perdido medio año", añadió.

El extremo fue muy duro con el West Ham, recordando en tono sarcástico algunos de los momentos que allí vivió: "Ante el Hull, en casa, ganamos por 1-0, pero nos remataron cuatro veces al palo. En el vestuario todos estaban felices, pero el hombre del partido ese día fue en realidad el poste. Ya no tenía margen para mejorar. Al contrario, corría el riesgo de ir para atrás", adujo.

"En enero, les comuniqué que quería irme al Marsella. Cuando me dijeron que no, les anuncié que no jugaría más con el West Ham"

Payet se defendió de las críticas recibidas por su abrupta ruptura con el club de la Premier: "Les advertí que lo haría, y quizá creyeron que no iba en serio. Bilic, mi entrenador, sabía que quería irme a otro sitio. Lo discutimos a principio de temporada, cuando volví de la Eurocopa, pero el club me cerró las puertas, y acepté su decisión. Cuando un equipo anuncia que vales más de 100 millones de euros, las negociaciones nunca llegan lejos. Pude haber ido a la guerra el pasado verano. Lo que pasó en agosto fue mal llevado", indicó.

"En enero, les dije que quería irme al Marsella, y a ningún otro sitio. El día que me dijeron que no, y que era definitivo, les dije que no volvería a jugar con el West Ham", agregó.

El delantero es consciente de que la afición del club inglés se tomó muy mal su 'plantón': "No estaba asustado, pero era más complicado para mi familia. Se dijeron muchas cosas, pero nunca me preocupé por mi coche, por ejemplo. Seguí viviendo con normalidad. Era lo esperado. Durante un año y medio, me dieron mucho apoyo y nunca lo olvidaré".