El PSG gana con un golazo de Neymar en el 92

Arnau Montserrat

El reencuentro entre Neymar y la afición del PSG tuvo uno de esos finales reivindicativos que solo parece que existan en las películas. El recibimiento hostil que tuvo el brasileño cada vez que tocaba la pelota se acabó convirtiendo en aplausos tras un gol de chilena en el descuento para dar el triunfo al equipo de París. 

La primera mitad del PSG estuvo en la línea de la relación entre Neymar y la afición parisina: fría y distante. Como si el encuentro no fuera con ellos. Movidos por la inercia de ser superiores y con el pensamiento que el gol iba a caer más pronto que tarde. Nada más lejos de la realidad. Los minutos pasaban y las ocasiones de gol no llegaban ante una muralla de cinco defensas que dejaron secos a jugadores como Di María o Sarabia sin espacios para mover el balón.

Tampoco estuvo muy participativo Neymar, un alivio para todos aquellos que le pitaron durante toda la primera mitad. De sus botas nació un disparo que se marchó ligeramente fuera. La única más clara para el PSG. De hecho nadie se hubiera extrañado si el Estrasburgo se hubiera puesto por delante. Ajorque hizo estirarse a Keylor Navas para realizar su primera gran parada en París. Salvadora.

El descanso no le sirvió a los de Tuchel para reaccionar y los problemas en zona de creación no se solucionaron. La tendencia hizo que Neymar bajara a recibir al centro del campo para intentar conducir él las jugadas ofensivas. El primer tiro entre los tres palos de los parisino no llegó hasta pasado el minuto 60 y así era muy difícil ganar.

Debutó Icardi en la punta de ataque como revulsivo de urgencia para Tuchel. La entrada de Herrera también despertó a los locales que sin embargo atrás siguen teniendo problemas. Un error en salida de balón dejó a Ajorque solo ante Keylor que volvió a ser providencial con un pie que evitó el tanto del Estrasburgo. La respuesta del PSG no se hizo esperar y Neymar falló también un uno contra uno. El partido parecía romperse.

Los deberes para última ahora. El PSG pegó el arreón final en búsqueda de un tanto que salvara los muebles. Ander tuvo la más clara con un potente disparo que obligó a Sels sacar una mano que pudo valer un punto para los suyos. La jugada posterior terminó con polémica por unas manos que reclamaron los jugadores de Tuchel dentro del área. Un posible penalti a cinco minutos del final que no señaló el colegiado.

La jugada vino de un saque de esquina que Neymar golpeó de forma directa a puerta buscando el gol olímpico pero se topó con el primer palo. La obra de arte llegó en el descuento. Tras aguantar todo un partido de pitos, insultos y mal ambiente con la afición, Neymar sacó su talento a pasear con una chilena salvadora. Aplausos, manos a la cabeza y boquita cerrada. Habló sobre el terreno de juego que es donde lo sabe hacer mejor. Tres puntos y liderato amarrado.