En Francia sitúan a Cesc Fàbregas en el centro de la diana

Cesc Fàbregas, centrocampista del AS Mónaco

Cesc Fàbregas, centrocampista del AS Mónaco / AFP

SPORT.es

Cesc Fàbregas se encuentra en el centro de la diana. El centrocampista catalán, que tras su paso por el Arsenal, el Barça y el Chelsea recaló en el Mónaco de la mano de Thierry Henry, es cuestionado tras ocho meses en el club del Principado y le atribuyen la crisis del conjunto monegasco.

El diario 'L'Équipe', con un enorme peso en el deporte francés, le dedica un informe en el que repasa su situación a remolque de la reciente derrota del Mónaco ante el Olympique de Marsella (3-4) en la Ligue 1. Y le atribuye mucha responsabilidad en la décimo novena posición en la tabla e incluso que el técnico Leonardo Jardim esté en una situación precaria.

"Cesc Fàbregas, la larga decepción", titulan. Del centrocampista de Arenys de Mar "se suponía que debía despertar al AS Monaco, trabajar con Thierry Henry, al que estaba muy unido desde su pasado común en el Arsenal y recuperar su brillantez para demostrar que el Chelsea se equivocó al proponerle solo un año de contrato".

"VARIOS FRACASOS"

Más de ocho meses después de su traslado a Mónaco, Cesc Fábregas se enfrenta "a varios fracasos", afirman de manera contundente. Le causan de que "nunca lideró al Mónaco", que solo salvó la categoría en la última jornada, "solo colaboró unos días con Henry", rápidamente cesado y reemplazado por Leonardo Jardim, "y sus actuaciones quedan muy alejadas del nivel del centrocampista de clase mundial que se supone que es".

Cesc es señalado como el paradigma de un desafortunado mercado de fichajes de invierno del Mónaco. únicamente salvan a Gelson Martins. En el caso de Fàbregas, esta temporada debía ser titular indiscutible, "pero su inicio del Campeonato es catastrófico". Y recuerdan su expulsión ante el Olympique de Lyon (0-3) a los 30 minutos para unirlo a su regreso "desastroso el domingo contra Marsella (3-4)".

RESPETADO EN EL VESTUARIO

En su descargo defienden que se encontrarían más cómodo jugando en un 5-3-2 y no en un 4-4-2. "Difícilmente podría esperarse que vaya al choque, pero también encadenó pases imprecisos o intrascendentes". Aseguran que tras una "desigual pretemporada, parecía haber aprovechado su descanso de tres partidos para ponerse en forma" y que en el vestuario del Mónaco "se ha convertido en un líder respetado". Pero  todo esto no ha resistido la prueba del terreno de juego.

Recuerdan en 'L'Équipe' que "el contrato de oro (de Cesc) terminará en 2022, una pequeña eternidad", y que no es fácil enviar al centrocampista internacional al banquillo. Jardim está dispuesto a sacrificar el 4-4-2 por un 5-3-2 pero "obligaría al técnico portugués a sacrificar elementos más convincentes como Gelson Martins o Golovine".