El Angers ahonda en la crisis del Mónaco (0-1)

Bahoken fue el héroe del partido con su gol

Bahoken fue el héroe del partido con su gol / AFP

Albert Gracia

El Mónaco cayó estrepitosamente ante un Angers que mereció la victoria. Los de Jardim se complicaron la vida y ya durmieron en la decimosexta posición. Arranque para olvidar del conjunto monegasco con tan solo 6 puntos de 21 posibles. 

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Ligue 1

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Alineaciones
Mónaco
Benaglio; Sidibé, Glik, Jemerson, Henrichs; Tielemans (Mboula, 63'), Aholou; Grandsir (Diop, 80'), Golovin, Chadli (Pellegri, 46'); Falcao
Angers
Butelle; Manceau, Thomas, Pavlovic (Traoré, 8'), Bamba; Santamaría, Mangani (Pajot, 78'), N'Doye; Capelle (Manzala, 68'), Bahoken y Tait.

El Mónaco salió muy blando al Louis II, sin ideas y a la espera de que Falcao pudiera decidir en cualquier momento. No obstante, delante tuvo a un Angers que se mostró como un equipo muy serio durante todo el partido, especialmente en los primeros minutos, atemorizando al conjunto monegasco en las contras y con grandes ocasiones para abrir la lata. Los de Jardim, de hecho, no dieron con la tecla en la primera parte y el juego brilló por su ausencia.

El Angers, por contra, sí que supo jugar sus cartas, culminando su buen arranque con un gol. Avisó Tait y Mangani con sendas oportunidades pero fue Bahoken, tras rematar una segunda jugada de centro lateral, el que puso la diferencia en el marcador. Y aquí, prácticamente murieron los primeros 45 minutos, con dos equipos que pasaron a tantearse sin exponerse en exceso. El Mónaco se adueñó del balón ante un Angers que poco le importaba. 

En la reanudación el Mónaco sí demostró que era el equipo local y el conjunto que debe luchar por volver a estar arriba en Francia. La posesión y las ocasiones las empezaron a monopolizar los hombres de Jardim, acosando a un rival que se defendía como podía. Falcao, a la salida de un córner, tuvo el empate en sus botas pero no supo dirigir su remate.

Los minutos empezaban a pasar muy rápido para un Mónaco que no veía cómo derribar el muro defensivo del Angers. Entre tanto, el equipo dirigido por Moulin se aproximó con timidez a la meta de Benaglio pero sin claras intenciones de ir a abrir brecha. Las posesiones largas del conjunto monegasco continuaron pero lo cierto es que el Mónaco no dio sensasción de verdadero peligro y el marcador ya no se movió