El Valencia culmina su semana perfecta

Wass, el artífice de la victoria che

Wass, el artífice de la victoria che / EFE

Francesc Ripoll

Se mantiene la alegría a las orillas del Turia. Tras la remontada ante el Lille, el Valencia, gracias a los goles de Wass y Ferran Torres, bajaron al Granada de la nube. Los de Celades, superiores durante todo el choque, logran su tercer triunfo consecutivo y parece que por fin levantan el vuelo.

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Liga Santander

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Alineaciones
Valencia
Cillesen; Wass, Garay, Gabriel, Gayá; Kondogbia (Jaume Costa, 36'), Parejo, Manu Vallejo (Kang In Lee, 87'), Ferran; Rodrigo (Gameiro, 51') y Maxi Gómez.
Granada
Rui Silva; Quini, Germán, Domingos Duarte, Neva (Carlos Fernández, 81'); Gonalons (Montoro, 63'), Azeez (Darwin Machís, 77'), Herrera, Vadillo, Puertas; Soldado.

Encontró premio Manu Vallejo al trabajo y a la perseverancia con una titularidad. Y vaya partido para estrenarse, donde aquellos entrenadores amantes de un juego más calmado y posesión se habrían puesto nerviosos desde el primer minuto. Ambos equipos, intensos a más no poder, salieron al césped con la idea de controlar el esférico, pero la presión rival y la falta de acierto provocaron contraataques rápidos casi consecutivos.

No obstante, las ocasiones llegaban a cuentagotas. El tiro de Maxi Gómez que rechazó Rui Silva tras un robo fue la más clara de la primera mitad, pues las zagas de sendos conjuntos estaban de lo más enchufadas. La mala noticia, la enésima lesión para el Valencia. Esta vez, turno de Kondogbia. Los nazaríes aguantaban las embestidas ches y no dudaban a la hora de salir a la contra, eso sí, sin éxito.

Ya dicen que las desgracias nunca vienen solas. Justo empezar la segunda, otro varapalo para los de Celades. Gameiro tuvo que sustituir a Rodrigo, lesionado. Achuchaba un tanto más el Valencia, que celebró un gol de Parejo anulado posteriormente por el VAR. Se interpretó que Maxi Gómez molestó el guardameta en el tiro del capitán. El guión era muy similar al primer tiempo. Dominio de los ches ante un Granada desaparecido ofensivamente, pero la insistencia en ataque no era suficiente para generar peligro.

Hasta que apareció Wass. Reconvertido como mediocentro, cazó un balón dentro del área pequeña y fusiló a Rui Silva para delirio de Mestalla. Esta vez, el VAR validó el tanto tras una larga espera. Sin otra opción, los de Diego Martínez se estiraron para buscar un empate que nunca llegó. Y no llegó gracias a Wass, que sacó sobre la línea un remate de Duarte. Con el Granada volcado al ataque, se le anuló un gol a Gameiro pero Ferran puso la guinda. Él mismo condujo una contra que finalizó con un zurdazo a la escuadra. Mestalla sigue sonriendo y hunde a los andaluces.