Villarreal sonríe, Granada llora

La temporada de LaLiga Santander llega a su fin y, como cada año, eso comporta la alegría de unos y la tristeza de otros. Las caras de los aficionados del Cádiz y del Mallorca que se desplazaron hasta Mendizorroza y El Sadar para apoyar a sus respectivos equipos contrastaban claramente con las de los casi 18.000 asistentes que se reunieron en el Nuevo Los Cármenes para acompañar al Granada en la lucha por la salvación.

Casi 18.000 voces se unieron en una sola para alentar a los suyos, pero no pudieron evitar el descenso a los infiernos del Granada. Descenso doloroso pues, en cuestión de un año, el cuadro nazarí ha pasado de quedarse a las puertas de unas semifinales de Europa League a formar parte de la próxima edición de LaLiga Smartbank.

A priori, los pupilos del recién llegado Aitor Karanka partían con una ligera ventaja respecto a Cádiz y Mallorca, pues atesoraban un punto más que sus competidores antes de empezar la jornada. Ventaja que quedó en agua de borrajas, pues tan solo pudieron sumar un punto en el empate a cero ante el Espanyol. Jorge Molina dispuso de una oportunidad de oro desde los once metros, pero su disparo se perdió por la línea de fondo.

Redención

Mientras Granada lloraba, se produjo una explosión de júbilo en las gradas de El Sadar. El Mallorca logró el ansiado objetivo de la permanencia gracias a los goles de Ángel Rodríguez y Clément Grenier, ambos en la segunda parte. El Osasuna se mostró combativo, especialmente en el primer acto. Incluso pudo adelantarse en el electrónico con una gran ocasión de Budimir al filo del descanso. Pero terminaron bajando el ritmo con el paso de las minutos, ya sea por la incesante presión de sus adversarios o por la intrascendencia del partido para sus intereses.

Más difícil lo tuvo el Cádiz en Mendizorroza. El conjunto dirigido por Sergio González no solo necesitaba sumar de tres en Vitoria, pues su permanencia en la máxima categoría estaba condicionada por los resultados de sus rivales. Sin embargo la fortuna pareció sonreírles y ambas condiciones se cumplieron. La primera, gracias al gol del ‘Choco’ Lozano, que devolvió la ilusión a los gaditanos cuando apenas llevaba cuatro minutos sobre el césped. La segunda, gracias al empate del Granada.

Lucha por Europa

No solo había mucho en juego en la zona baja. Villarreal y Athletic Club lucharon por la séptima plaza, aquella que daba acceso a la Conference League. El Submarino Amarillo, que dependía de sí mismo para cumplir el objetivo, terminó llevándose el gato al agua tras conquistar el Camp Nou gracias a los tantos de Pedraza y Moi Gómez (0-2). Los leones, por su parte, cayeron ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán por culpa de un solitario gol de Rafa Mir (1-0).