El Valencia naufraga en Son Moix

El Valencia desaparece en Son Moix y cae goleado ante el Mallorca

Francesc Ripoll

Fiesta en Son Moix. El Mallorca se gustó y se dio un homenaje ante un Valencia deprimido. En una primera mitad prácticamente perfecta de los de Vicente Moreno, con Salva Sevilla y Budimir en estado de gracia, vapulearon al conjunto che, que reciben otro varapalo tras la nula imagen que mostraron en la Supercopa. Los bermellones, eufóricos, salen provisionalmente de los sitios de descenso.

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Liga Santander

4
1
Alineaciones
Mallorca
Reina; Gamez, Valjent, Raillo, Lumor; Dani Rodríguez, Baba, Salva Sevilla (Aleix Febas, 69'), Lago Junior (Kubo, 80'), Cucho (Pozo, 64'), Budimir.
Valencia
Jaume; Wass, Gabriel, Diakhaby, Gayà; Carlos Soler, Parejo, Coquelin, Cheryshev (Ferran, 44'); Gameiro (Kang In Lee, 61'), Maxi Gómez.

Llovía y mucho en Mallorca. Pero para los aficionados del conjunto balear, pronto esta lluvia se convirtió en una mañana de lo más soleada, propia de un caluroso verano. Y es que pasados cuatro minutos, Parejo cometió una falta que Salva Sevilla botó a la perfección y Raillo mandó el balón al fondo de las mallas. Inicio inmejorable para los bermellones.

Pese a que el Valencia intentó reaccionar, no daba sintomas de mejora. La solidez defensiva de los de Vicente Moreno desvanecía cualquier atisbo de recuperación de los chestotalmente perdidos en Son Moix. Todos los duelos caían en el bando local. El Mallorca olió sangre e hizo más daño. Otro mazazo. Disparo de Dani Rodríguez que rebotó en Budimir antes de entrar y suponer el 2-0. Pero no había suficiente. Los baleares querían más. Y tras una excelente triangulación, otra vez Budimir sentenciaba el encuentro y hundía a los ches, que no dispararon a puerta en toda la primera mitad. Un desastre que obligó a Celades a hacer el primer cambio antes del descanso. Ferran por Cheryshev.

Cambió el dibujo táctico el técnico andorrano tras el receso, pero duró bien poco. En un agarrón, Parejo vio la segunda amarilla y dejó a los suyos con uno menos. El Valencia, muy escaso en su juego, no pudo hacer nada más que ver pasar el cronómetro y pensar que el Barça de Setién le espera la semana que viene. Eso, y ver como Dani Rodríguez se sacó un zambombazo para hacer el cuarto y causar el delirio en Son Moix, al que ese diluvio universal le supo a gloria. El gol de Ferran, ni importó.