En-Nesyri presiona a los tres de cabeza

Ambicioso y perseverante, el Sevilla no se descabalga de la lucha por el título de Liga. Con más oficio y practicidad que destellos de calidad, los nervionenses salieron airosos del Ciutat de València ante un deprimido Levante. En-Nesyri convirtió en oro una de las escasas aproximaciones andaluzas sobre el área de Cárdenas.

Levante-Sevilla (21-4-21)

Liga Santander

LEV

0

1

SEV

Alineaciones

Levante
Cárdenas; Son, Róber Pier (Sergio León, 73'), Duarte, Vezo, Toño; Bardhi (Morales, 59'), Malsa, Melero (Rochina, 59'), De Frutos (Doukouré, 73'); Dani Gómez (Roger, 85').

Sevilla
Bono; Navas, Koundé (Gudelj, 86'), Diego Carlos, Acuña; Fernando, Jordán; Papu Gómez (Óscar, 86'), Suso (Rakitic, 75'), Ocampos (Munir, 89'); En-Nesyri (De Jong, 86').

Gol

0-1 M.53 En-Nesyri.

Árbitro

Campo

Ciutat de València. A puerta cerrada.

Desinhibidos comparecieron los ‘granotas’, revolucionados en su alineación por Paco López tras el 1-5 encajado ante el Villarreal. Lopetegui, en cambio, apostó por los mismos once de Anoeta y, lejos de acusar el cansancio, los nervionenses también ofrecieron su versión más desacomplejada. 

El marcador no se alteró. Ni tan siquiera cuando Joan Jordán acomodó el cuerpo y golpeó de diestra con muchísima intención un pase atrás de Navas. Entre la puntita del guante de Cárdenas y el travesaño escupieron el chut del catalán. 

El cuadro de Orriols se prodigó de forma insuficiente sobre el área de Bono. Muy cómodo el marroquí durante el primer tiempo, apenas inquietado por una combinación entre Son y Bardhi que el macedonio no dirigió con tino.

Con una basta

Se puso el partido para velocistas, roto en la medular, y en esa cualidad destacó la potencia de En-Nesyri. Suso convirtió una pérdida de Son en la divisoria en una asistencia en profundidad de gol para el marroquí. Acompasó la carrera el ‘killer’ sevillista, recortó a Cárdenas y Vezo con un manejo pasmoso de ambas piernas y la alojó con serenidad. 

El Sevilla atrajo el encuentro a su terreno y supo sacar su carácter y su oficio de campeón para domar a su adversario. Bajo la fina lluvia valenciana, los andaluces pudieron sentenciar en una acción a trompicones de Ocampos que repelió la retaguardia de Orriols. El duelo se desactivó en los últimos minutos, con el único sobresalto de la lesión de Jules Koundé, una de los intocables de Lopetegui.